El papel de la mujer en el mundo del deporte ha dado un salto considerable. Cada vez son más atletas femeninas las que se empoderan y toman un papel crucial en la conquista de las metas deportivas.
No ha sido sencilla su lucha, porque han tenido que romper con muchos tabúes, pero poco a poco los paradigmas se han roto. De cara a los Juegos Olímpicos de París 2024, que se inaugurarán este viernes, la delegación que representará a México vivirá un hecho histórico: por primera vez la nómina de atletas nacionales está compuesta en su mayoría por mujeres.
La delegación de 109 deportistas se divide en 63 mujeres y 46 hombres. También -por primera vez en la historia- las dos cabezas del deporte mexicano son mujeres: María José Alcalá, presidenta COM. Y Ana Gabriela Guevara, directora de Conade. Lo que muestra, el papel que tiene la mujer mexicana en el deporte federado.
De los Ángeles 1932 a México 1968
Es cierto que el papel de la mujer mexicana en el deporte tiene raíces prehispánicas, pero en lo que se refiere al deporte de élite, las primeras en abrir la brecha en una justa veraniega fueron: María Uribe Jasso en lanzamiento de jabalina y Eugenia Escudero en florete.
La presencia de las mujeres mexicanas en competencias fue incrementando, ganaron terreno y prestigio, también en el ámbito social, aunque éste se les resistía a muchas de ellas; sin embargo, en México 1968 se rompió otro paradigma. Enriqueta Basilio fue la primera mujer en la historia en portar la antorcha olímpica y la que encendió un pebetero.
También, en la justa que se celebró en la capital mexicana, llegaron las primeras medallas obtenidas por mujeres. La esgrimista María del Pilar Roldán ganó plata en la prueba de florete. Y la nadadora María Teresa Ramírez logró el bronce en los 800 metros libres.
Las mujeres toman el mando
La lista de mujeres que han construido la historia del deporte mexicano es amplia, cada una dejó su semilla y sirvió como fuente de inspiración para otras. Clavadistas, ciclistas, velocistas, halteristas, taekwondoines, arqueras… son disciplinas que han visto brillar a las mujeres mexicanas en el máximo escenario.
De hecho, en las últimas dos décadas, el éxito de las mujeres atletas mexicanas creció de forma considerable, pues han sido ellas las que han conquistado el mayor número de medallas por encima de los varones.
Sidney 2000 marcó un parteaguas en el deporte olímpico femenil. Soraya Jiménez se convirtió en la primera mujer en lograr una medalla de oro para México, su conquista se dio en levantamiento de pesas, una gesta que entró en los libros de historia porque fue la primera vez que la halterofilia se abrió para que las mujeres pudieran participar.
En los Juegos que se han desarrollado del nuevo milenio a la fecha, las mujeres son las que han asumido el protagonismo en el deporte mexicano. En 6 ediciones de la justa veraniega, México ha conquistado 31 medallas, de las cuales 17 han sido logradas por mujeres y 13 por hombres; además de una mixta.
Los Juegos de Londres marcaron el punto más alto del deporte femenino en nuestro país, con la conquista de 6 medallas: Paola Espinosa y Alejandra Orozco (plata en clavados sincronizados); Aída Román (plata en tiro con arco); Mariana Avitia (bronce en tiro con arco); Laura Sánchez (bronce en clavados); Luz Acosta (bronce en Halterofilia) y María del Rosario Espinoza (bronce en Taekwondo). Fueron quienes firmaron la mejor participación de las mujeres mexicanas en Juegos Olímpicos.
Precisamente, María del Rosario Espinoza es la atleta mexicana que más medallas ha conquistado en la historia de los JO con tres preseas: 1 oro en Pekín 2008; 1 bronce en Londres 2012 y 1 plata en Río de Janeiro 2016.
París 2024 es una edición especial para México, sus mujeres representan el empuje que han tenido para abrirse paso en la sociedad, sus resultados son su carta de presentación, pero no solo hay que reconocer a las que subieron y subirán al podio, porque todas son un ejemplo. Ellas son más altas, más fuertes y más rápidas.
Fuente: Milenio