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El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, emitirá este martes una orden ejecutiva para otorgar más visas de empleo y a los llamados ‘Dreamers’ (Soñadores) y reduce el plazo para que cónyuges de ciudadanos estadunidenses obtengan residencia legal (green card).

El Departamento de Seguridad Interior que dio a conocer las directrices del anuncio que hará Biden está tarde en el marco del doceavo aniversario de la instrumentación del Acta Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), calificó al plan de un avance en materia migratoria.

“Este anuncio utiliza los mecanismos de órdenes existentes para promover la unidad familiar, pero solamente el Congreso federal puede arreglar las imperfecciones de nuestro sistema migratorio”, indicó el Departamento de Seguridad Interior (DHS) en un comunicado de prensa.

El cambio en los procedimientos migratorios que anunciará Biden esta tarde en la Casa Blanca, generó críticas de legisladores federales republicanos en el Capitolio, quienes dicen que la medida tiene objetivos electorales porque ocurre a meses de las elecciones del 5 de noviembre.

Con el nuevo plan migratorio unas 500 mil personas extranjeras cónyuges de ciudadanas o ciudadanos estadunidenses y unos 50 mil más hijastros o hijastras de estos, podrán solicitar la residencia permanente dentro de los Estados Unidos sin tener que salir de este país por 10 años.

El DHS informó que los 500 ciudadanos extranjeros casados con ciudadanas o ciudadanos estadunidenses que podrán beneficiarse con las nuevas modalidades migratorias han estado viviendo en Estados Unidos en los últimos 23 años, lo mismo para el caso de hijastras e hijastros.

En paralelo, Biden anunciará un plan de reunificación familiar para menores de edad separados de sus padres en su ingreso como inmigrantes indocumentados y que son nacidos en Colombia, El Salvador, Guatemala, Honduras y Ecuador.

Otros 800 menores de edad inmigrantes extranjeros cuyos padres son de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, también se beneficiarán de un plan específico de reunificación familiar, que al igual que anterior fueron objeto de separación durante la presidencia de Donald Trump.

La condición que impone el DHS de elegibilidad para los programas que anunciará Biden y que afecta a los menores de edad, es que no estén bajo ningún programa de libertad condicionada en materia migratoria en Estados Unidos y que tengan amigos o familiares viviendo en el país.

Respecto a los cónyuges de ciudadanos estadunidenses, se beneficiarán todos los que no tengan antecedentes penales y se sometan a un escrutinio individual por autoridades migratorias, que lleven por lo menos 10 años viviendo en Estados Unidos cumplidos este 17 de junio de 2024, o que cuenten con un acta de matrimonio con esa misma fecha.

Las mismas condiciones y fechas se aplicarán para las hijastras e hijastros de estos matrimonios y, al obtener la residencia permanente, todos, en un plazo de 3 años en lugar de 5; podrán iniciar el proceso de ciudadanía estadunidense por naturalización.

Biden quien era vicepresidente de Estados Unidos el 15 de junio de 2012 cuando el entonces presidente, Barack Obama instrumentó DACA, anunciará la ampliación de este programa.

“En trabajo conjunto con el Departamento de Estado se hará más eficiente y fácil la entrega de visas de trabajo a individuos indocumentados elegibles para ello, incluyendo a los que entran en el programa de DACA”, destaca el DHS.

Para que los Soñadores se beneficien del plan de ampliación de visas de trabajo y residencia temporal, deberán no tener antecedentes penales y contar con títulos de educación profesional de universidades o tecnológicos de Estados Unidos.

También se beneficiarán las personas que tengan conocimiento y habilidades para ejercer trabajos muy específicos y especiales en áreas científicas y tecnológicas.

Con respecto a los 50 mil cónyuges de ciudadanas o ciudadanos de los Estados Unidos que se beneficiarán del plan que anunciará Biden, el DHS considera que la mayoría de estos son ciudadanos mexicanos.

En 2017 el entonces presidente Trump intentó eliminar DACA, argumentando que la medida era inconstitucional pero varias cortes federales intervinieron para evitar la anulación del programa migratorio.