Por: Antonio López Moreno

Más de 200 activistas y ambientalistas de Sonora marcharon en Hermosillo para defender el rancho El Aribabi, al considerar que se ve amenazado por el proyecto ferroviario que atravesará la localidad de Ímuris para llegar hasta el municipio de Nogales.

El contingente se reunió en las escalinatas de la Universidad de Sonora (UNISON), desde donde partieron a Palacio de Gobierno para elevar la voz y pedir que frenen el proyecto en tanto no muestren un estudio de impacto ambiental.

Sergio Müller, vocero de la asociación “Caminantes del Desierto”, explicó que han sostenido encuentros con las autoridades.

“Básicamente se llegó a que se va establecer una mesa técnica de trabajo para evaluar posibles opciones donde aún hay cierta inconformidad”, dijo.

Los manifestantes marcharon sobre el bulevar Rosales hasta llegar a la zona gubernamental, donde nuevamente externaron su rechazo al tren.

Universitarios, profesionistas y sonorenses de distintos municipios se dieron cita.