El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) reconoció que necesita mayor financiamiento para garantizar la prevención de nuevas plagas y epidemias, ante los efectos de la crisis climática en el campo.
Al presentar el primer Congreso de Sanidad e Inocuidad de Agroalimentaria, el sector privado, representado por el Consejo Nacional Agropecuario (CNA), y el Senasica de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo rural (Sader) advirtieron de nuevas amenazas a la sanidad de los productos.
Es por ello que enfatizaron la necesidad de enfocar recursos del presupuesto a la vigilancia de los productos agroalimentarios, al señalar que se ha reducido hasta en 43 por ciento los recursos en términos reales para esta materia de relevancia para el campo, las exportaciones, importaciones y el comercio nacional de comestibles.
El director general de inocuidad Agroalimentaria, Acuícola y Pesquera del Senasica, David Soriano, detalló que en 2018 el presupuesto para este organismo fue de 6 mil 882 millones de pesos (unos 404 millones de dólares o 372 millones de euros), mientras que en la actualidad es de 5 mil 42 millones de pesos (296 millones de dólares o 272 millones de euros).
Esto, dijo, es una reducción real del 42.7 por ciento, en comparación con lo que se tenía en 2018, previo a la llegada de la presente Administración pública, incluyendo los ajustes por la tasa de inflación por cada año.
Sin embargo, el directivo del Senasica señaló que cuentan con una fuerza de más de 2 mil funcionarios en este organismo de la Sader para afrontar la prevención de plagas y epidemias en la producción nacional, así como en la vigilancia a productos importados y comercializados en el país.
A pesar de ello, Soriano aseveró que esto no ha tenido impacto real en las acciones del Senasica.
“Es mejor hacer todo esto de manera preventiva y no correctiva, entonces es muy importante tener todo este presupuesto para realizar todas las acciones”, matizó.
No obstante, admitió que con mayores recursos podría desplegarse una mayor vigilancia y controles de seguridad para evitar nuevas variantes de plagas que antes no entraban al territorio mexicano.
Mario Puente, vicepresidente de Sanidad e Inocuidad Agroalimentaria del CNA, advirtió que el cambio climático provoca plagas más agresivas o que antes no se presentaban en ciertas regiones.
Señaló que en foros como el primer Congreso de Sanidad e Inocuidad de Agroalimentaria debe subrayarse la importancia de la trazabilidad en la prevención, ya que, aseguró, es “un factor muy relevante en la determinación de los riesgos sanitarios y en poder actuar oportunamente”.
Dijo que México actualmente se enfrenta a la influenza aviar de alta patogenicidad; la mosca del Mediterráneo, que afecta a frutas y hortalizas; el gusano barrenador, que actúa en contra del ganado, y la paratrioza, que afecta la producción de papa, entre otras.