En pediatría del Seguro Social convalece un niño de 11 años que fue encerrado y lesionado con máquinas y navajas en una barbería, por un empleado que al parecer está detenido.

El incalificable suceso se suscitó poco antes de las 15:30 horas de este martes en colonia Urbi Villa del Rey, en Cajeme, Sonora.

Se estableció que el negocio se denomina Barber Luna” y se localiza en Antonio Caso entre Cerdeña y Aviñón.

El lesionado es David, de 11 años, quien fue llevado por su señora madre para que le cortaran el cabello.

Luego de esperar unos minutos hasta que le tocó su turno, la señora se acordó que había olvidado el dinero con el pagaría el servicio y se regresó a su casa.

Mientras que a su hijo le estaba cortando el cabello un tipo, cuya edad fluctua entre los 20 y 25 años.

Al regresar, la mujer observó que la barbería estaba cerrada con la cortina metálica y sus respectivos candados.

Y, en el interior escuchaba que su hijo golpeaba la cortina y le gritaba a ella para que lo auxiliara en medio de desesperados llantos.

Por lo que la madre de familia comenzó a pedir auxilio a vecinos y estos se acercaron para ayudarla y botaron los candados de la cortina metálica.

Fue así como lograron rescatar al pequeño y en ese momento llegó su padre y con la premura del caso lo trasladó en vehículo particular al puesto de socorros de Cruz Roja.

La doctora en turno le diagnosticó politraumatizado con golpes y heridas múltiples en el cráneo de uno y dos centímetros de extensión.

Igualmente dijo que presentó traumatismo craneoencefálico moderado, considerando necesario su traslado al hospital del Seguro Social.

Fue recibido en el área de urgencias y después ingresado al área de shock para ser valorado y realizarse exámenes médicos.

Trascendió que más tarde, el tipo presuntamente fue detenido por elementos de la Policía Municipal y sería remitido al Ministerio Público de la fiscalía estatal.

Debido al hermetismo de las autoridades no se logró establecer de momento su identidad. Solo se dijo que es empleado de la barbería.

El hecho generó honda indignación entre la sociedad cajemense por la artera acción que el individuo cometió contra el pequeño.