Tras un video difundido en el que aparecen cinco estudiantes vestidos de sicarios con el rostro cubierto y quienes simulan la ejecución de un compañero de clases en una preparatoria de Guaymas, la organización Reinserta expresó su preocupación a la “normalización de la violencia y la narcocultura” entre este sector de la población.
Se informó que alrededor de 250 mil niños corren el riesgo de ser recluidos por el crimen organizado en México, de acuerdo con cifras de la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) y el Observatorio Nacional Ciudadano (ONC).
En cambio, la organización Reinserta informó que las niñas y los niños son reclutados por los grupos criminales entre los 9 y 11 años para llevar mensajes, informar, robar, secuestrar y hasta matar.
Algunos grupos delictivos organizados utilizan niños más pequeños para tareas sencillas como informar y observar; a partir de los 12 años empiezan a cuidar casas de seguridad o a transportar droga; posteriormente a los 16 portan armas y son los encargados de realizar secuestros y asesinatos.
Otras actividades que realizan los menores de edad y jóvenes que documentó la organización son: halconeo o patrullaje; venta y transporte de drogas; homicidio; cruce de indocumentados; portación y uso de armas; descuartizamiento de personas; ocultamiento y destrucción de cuerpos.
Así como limpia de calles, que consiste en ubicar y matar a delincuentes comunes; limpieza de lugares donde se llevaban a cabo las torturas y los descuartizamientos; cocinar los cuerpos, lo que implica disolver los cuerpos humanos o parte de ellos en sustancias químicas para desaparecerlos; cuidar casas de seguridad; extorsión a hoteleros y comerciantes de la zona; elaboración y colocación de narcomantas.
Reinserta indica que datos recabados mediante solicitudes de información hechas por EL UNIVERSAL, en el 2019, señala que la Policía Federal realizó más del 90% de detenciones a niñas, niños y adolescentes, seguida de la Secretaría de Marina y la Fiscalía General de la República.
La zona norte del país conllevó el mayor número de detenciones en Chihuahua con 808 aprehensiones; Tamaulipas, 644; Guerrero, 470; el Estado de México, 279; Michoacán, 277; Zacatecas, 206; en Nuevo León, 204; en Sonora, 176; en Veracruz, 129, Ciudad de México, 106 y en Baja California, 101.
El reclutamiento de niñas, niños y adolescentes se lleva de dos formas, de acuerdo a la organización la invitación de amigos y conocidos; por supuesta iniciativa de los menores, lo cual los lleva a buscar en sus círculos cercanos el ingreso a los grupos criminales.