Sonora y nueve estados más concentran el problema de homicidios dolosos en el país, admitió el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) como argumento para rechazar que la violencia sea generalizada en los 32 estados.
De acuerdo con el razonamiento presidencial, las entidades donde un solo grupo del crimen organizado tiene presencia, cuentan con bajos índices de asesinatos.
“Hay lugares donde predomina una banda fuerte y no hay enfrentamientos entre grupos y por eso no hay homicidios, se los explico más: Sinaloa y Durango no están entre los estados con más homicidios porque hay una sola banda”.
Señaló que Sonora, Estado de México, Michoacán, Baja California, Zacatecas, Guanajuato y Jalisco concentran el 50 por ciento de los homicidios porque, caso contrario a Sinaloa y Durango, su territorio es disputado por dos o más carteles.
Y es que Sonora es la sexta entidad con más homicidios dolosos en el país. 449 asesinatos registrados entre enero y abril, de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp).
Para el presidente, el 75 por ciento de los asesinatos están relacionados con los enfrentamientos entre grupos del crimen organizado.
“Es el predominio de un grupo que no tiene competencia con otros y esto lleva a que no haya enfrentamientos”, señaló al referirse a los estados con más violencia. Además, López Obrador señaló que puede probar que el 30 por ciento del territorio nacional, “no está bajo dominio” de algún grupo armado como han señalado las agencias de inteligencia de los Estados Unidos.
SONORA EN DISPUTA
Un informe del Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos confirma lo asegurado por el presidente, Sonora es una zona de conflicto entre cárteles. El documento titulado ‘México: Crimen Organizado y Narcotráfico’ sostiene que la disputa entre el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) es la principal “amenaza continua” para el estado.
Ejemplo de esta guerra entre ambos cárteles es lo sucedido en Caborca en febrero pasado cuando un grupo de hombres armados, pertenecientes al Cártel de Sinaloa, sembraron el terror en las calles a punta de rifles asesinando a dos personas. O que Ciudad Obregón sea considerada la segunda ciudad más peligrosa del mundo, de acuerdo con el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal.
En la página tres del estudio se hace referencia al decomiso de armas sucedido en Navojoa en marzo pasado, calificado como ‘histórico’, y lo relaciona al poder que tienen los cárteles para seguir luchando contra sus contrarios por el poder de la plaza. “La gran incautación de armas convenció a algunos analistas de un aceleramiento en guerras internas en el Cártel del Sinaloa”, cita.
Destaca también que la riña entre ambos cárteles ha incrementado las desapariciones, “(…) los estados de México con los más altos índices de desapariciones, desde principios de 2019 hasta junio de 2020, incluyen muchas donde los cárteles son más activos: Guanajuato, Jalisco, México, Michoacán, Nuevo León, Sinaloa, Sonora, Tamaulipas, Zacatecas y Ciudad de México”.
Esto pese a que el gobierno de López Obrador creó la Comisión Nacional de Búsqueda en 2019 para evaluar la problemática, contrario a ello, el descubrimiento de fosas clandestinas se ha incrementado. “Los datos del gobierno mexicano no se han informado de manera consciente o completa”, aseguran y lo atribuyen a “una estrategia de seguridad inadecuada”.
NO CAMBIA ESTRATEGIA
Pese a reconocer que hay un problema en Sonora por la disputa de ambos cárteles, López Obrador, aseguró que la estrategia de “abrazos, no balazos” continúa. “El país estaba en proceso de descomposición y si hubiera continuado la misma política neoliberal, el país estaría ingobernable, muy difícil de vivir en el país en esas situaciones”, señaló.
Fuente: Tribuna