La batalla por el litio y la energía eléctrica se convirtió en un juego de ajedrez en el Congreso de la Unión; la reforma eléctrica que frenaron PAN, PRD, PRI y MC cerró de tajo la puerta a la empresa china Ganfeng Llithium Co., en su intento por quedarse con el litio mexicano.
México cuenta con 36 concesiones de litio, las cuales están en manos de ocho empresas extranjeras, según datos de la Secretaría de Economía. De esas sólo una está en explotación y el resto en proceso de exploración.
La mina de litio, formada por 10 concesiones, está en Sonora, en el municipio de Bacadehuachi, en manos de las empresas Bacanora Mineral Limited (canadiense) y Cadence Minerals, que tiene su matriz en Gran Bretaña bajo la firma de Bacanora Lithium.
Por falta de recursos y lo poco atractivo que resultaba el litio para su venta, la mina no se desarrolló; sin embargo, en marzo de 2019 los japoneses voltearon la mirada a México y la empresa Hanwa adquirió 6% de las acciones de Bacanora Lithium.
China hizo lo mismo y en mayo Ganfeng adquirió 22.5% de las acciones, pagando 7 millones 563 mil 649 libras esterlinas, según datos de la empresa inglesa.
Las razones por las cuales la firma pasó de valer poco a ser un atractivo comercial las dio la firma especializada Mining Technology, cuando declaró al yacimiento que está en manos de Bacanora Lithium como el más grande del mundo, con 243 millones de toneladas probadas y probables, superando los depósitos de Chile, Bolivia, Argentina, Australia, Estados Unidos (en Nevada) y Canadá.
Ganfeng siguió aumentando su participación y en febrero de 2021 adquirió otro 50% de acciones, pagando por ello 21 millones 883 mil 485 libras esterlinas. Como referencia, Ganfeng aporta 20% del litio que Tesla, propiedad de Elon Musk, utiliza para las baterías de sus autos eléctricos.
Mineral estratégico
Rocío Nahle, secretaria de Energía, explica cómo fue que al rechazarse la reforma eléctrica el pasado domingo 17 en la Cámara de Diputados, Ganfeng dejó de tener la puerta abierta para quedarse con el litio de Sonora a través de Bacanora Lithium.
En la reforma eléctrica, en el artículo 27 de la Constitución se estableció que en cuanto al litio y demás minerales considerados estratégicos para la transición energética, no se otorgarán concesiones, explica la secretaria, quien aclara que se incluía un transitorio, el sexto, en el que se hacían ciertas excepciones.
Dicho transitorio establecía que todas las concesiones de minerales se conservan en los términos que fueron otorgadas. “Sin embargo, estas concesiones no amparan la explotación y producción del litio”.
Luego viene la excepción: “A las concesiones mineras ya otorgadas por el Estado mexicano y en las que a la fecha existen antecedentes de explotación de litio debidamente avalados por la Secretaría de Economía, no les será aplicada la restricción referida en el párrafo anterior”.
La secretaria de Energía detalla que, al estar ya en explotación el litio de Sonora a través de una planta piloto, la concesión se mantenía.
Fragmento del reportaje publicado en la edición 2373 del semanario Proceso cuya versión digital puedes adquirir aquí.