Un cómplice del narcotraficante Rafael Caro Quintero, en la muerte del agente de la DEA Enrique Camarena, y del piloto Alfredo Zavala Avelar en 1985, murió por causas naturales, recluido en Jalisco.
Se trata de José Luis Gallardo Parra, El Güero, de 75 años, murió en la sala chica del Viejo Hospital Civil de Guadalajara, por una afección renal.
El Güero se encontraba preso en el Reclusorio de Puente Grande, luego al estar pagando una pena de 86 años por el secuestro y homicidio de Kiki Camarena y del piloto.
En el 2014, su defensa solicitó al Quinto Tribunal Unitario del Tercer Circuito del Poder Judicial Federal la libertad anticipada, pero le fue negada porque no cumplía las tres terceras partes de la condena, que ascendería a 51 años, y las horas de trabajo no le alcanzaban para gozar de este beneficio.
Gallardo Parra fue detenido el 9 de enero de 1990, y desde hace 32 años, permaneció como prisionero.
Sus restos mortales serán entregados a sus familiares para los trámites funerarios.
Enrique Camarena, agente de la DEA asesinado en México
De acuerdo con la DEA ( Administración para el Control de Drogas, por su siglas en inglés), en febrero de 1985 el agente fue secuestrado, torturado y asesinado por integrantes del cártel de Guadalajara con la participación de agentes de la extinta Dirección Federal de Seguridad (el entonces aparato de inteligencia mexicano), luego de ser descubierto tras haberse infiltrado en la organización criminal.
La agencia cree que fue torturado durante dos días antes de morir cuando aplastaron su cráneo.
La muerte del agente especial desató la Operación Leyenda que terminó con la captura de tres capos: Caro Quintero, Ernesto Fonseca y Miguel Ángel Félix Gallardo. Ninguno fue extraditado a Estados Unidos desde entonces.