A raíz de que la Reforma Eléctrica no fue aprobada en la Cámara de Diputados en la sesión del domingo 17 de abril, el presidente Andrés Manuel López Obrador advirtió tener un “plan b”, el cual sería presentado a la ciudadanía en su conferencia de prensa de este lunes 18.
Se trata del proyecto de decreto por el que se reforman y adicionan nuevos preceptos a la Ley Minera. Esta iniciativa, a diferencia de la Reforma Eléctrica, solo requiere de mayoría simple para que sea aprobada, por lo que Morena y sus aliados (Partido del Trabajo y Partido Verde Ecologista de México) no tendrían la necesidad de contar con el apoyo del bloque opositor.
La iniciativa tiene como objetivo que el litio, así como otros minerales estratégicos para la transición energética, sea propiedad exclusivamente de la nación, de manera que el Estado mexicano será el único que pueda explotar este recurso natural en beneficio del pueblo de México. Asimismo, se busca evitar que el capital privado participe en las asignaciones mineras relativas al litio.
Sin embargo, se necesita de más tiempo para localizar los yacimientos de este recurso para su extracción, sin tener garantía de que sean económicamente viables, señaló Flor de María Harp, directora general del Servicio Geológico Mexicano, el cual apoyará al organismo descentralizado asignado por el gobierno mexicano en las tareas del reconocimiento y ubicación de zonas geológicas donde se puedan encontrar reservas de litio.
En conferencia de prensa mensual de la Sociedad Geológica Mexicana, que se llevó a cabo el pasado 30 de marzo, Flor Harp informó que hasta el mes de febrero de 2022 se han evaluado 66 áreas geográficas de las 82 que fueron incluidas en el programa de exploración por litio, y se identificaron otras 73 para su evaluación. Asimismo, se han protegido dos áreas como asignación minera en solicitud: San Sebastián y Amonitas.
De los estudios realizados, se identificaron 8 localidades en las que, de acuerdo a sus condiciones geológicas, se podría encontrar litio. Tres fueron ubicadas en Puebla, tres en Jalisco y dos más en San Luis Potosí.
De igual manera, detalló que este metal tiene mayores probabilidades de ser localizado en las capas de arcilla de entornos lacustre (zonas que guardan relación con un lago); no obstante, se tendría que estudiar metalurgicamente una ruta para su extracción, pues el costo para extraer el litio de la arcilla son muy elevados. Asimismo, reconoció que México no tiene la tecnología necesaria para estos trabajos.
Si bien señaló que Bacanora Litium (una de las 8 empresas mineras que tienen concesiones en México para explotar el litio) sí cuenta con esta tecnología, indicó que esa es la que ellos han desarrollado con base en las especies minerales que tienen, que es el polilitionita. Incluso, advirtió que se requerirían entre 3 y 4 años para la construcción de una planta de procesamiento que costaría miles de millones de dólares.
En ese sentido, la titular del SGM advirtió que el actual programa de exploración es muy corto, por lo que llevaría más de ocho meses la evaluación de sitios con potencial de litio. A manera de ejemplificación, expuso que para tener un conocimiento razonable sobre una localidad que se pudiera convertir en un yacimiento mineral, pueden pasar de 10 a 15 años.
Cabe recordar que a principios de febrero, el mandatario federal adelantó que se crearía una empresa estatal para explotar el llamado “oro blanco”, el cual es usado para las baterías de autos eléctricos, por ejemplo. “Ya se decidió que el litio va a ser explotado en beneficio de los mexicanos. Vamos a crear una empresa de México, de la nación, para el litio”, comentó en su conferencia de prensa matutina.
Por último, en octubre de 2021, el SGM indicó que se invertirían 55.2 millones de pesos en los dos próximos años (tiempo que Flor Harp consideró “corto”) para la exploración de litio, con el fin de recabar la información suficiente sobre la cantidad de este metal en México y así determinar si es viable económicamente su extracción.