En diciembre se vendieron en México 97 mil 365 autos, lo que significó una caída de 6.8 por ciento anual y el menor volumen para el último mes de cualquier año desde el 2009, cuando se colocaron 91 mil 961 unidades, revelan datos del INEGI.
Además, al realizar una comparación con respecto a su nivel prepandemia, las ventas automotrices del último mes del año se ubicaron 25 por ciento por debajo de diciembre del 2019, debido a que siguen las condiciones adversas relacionadas con la debilidad en la demanda interna y las afectaciones en la producción automotriz.
En entrevista con El Financiero, José Zozaya, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), explicó que la contracción obedece en parte al desabasto de semiconductores, la falta de suministro de gas natural en algunas regiones del país y a la crisis logística global provocada por la emergencia sanitaria.
“Pues sí, vemos el cierre de un año no tan optimista como lo habíamos esperado (…) Vamos a salir con ventas muy parecidas al 2020, que fue un pésimo año. Por la fuerza que la pandemia tuvo hubo un cierre de dos meses completos prácticamente de las plantas armadoras. En el 2021 no hubo cierre de plantas y cerramos casi igual (que el 2020) y eso te da una idea de lo complicada que estuvo la producción, venta y distribución de vehículos”, aseguró Zozaya.
Agregó que la regularización de los autos chocolate también afectó a la ventas de autos nuevos durante diciembre, así como los problemas de logística en algunos puertos del mundo.
En forma acumulada, México cerró el 2021 con la venta de un millón 14 mil 680 vehículos, lo que significó un alza de 6.8 por ciento en comparación con las 950 mil 63 unidades colocadas durante el 2020, año en que azotó la emergencia sanitaria a todo el mundo, pero todavía 23 por ciento debajo del millón 317 mil 931 unidades que se vendieron durante el 2019, es decir antes de la pandemia.
A pesar de los problemas de la falta de inventario la industria contemplaba finalizar este año con un volumen de ventas de un millón de unidades, lo que significó que lograron colocar 14 mil 680 unidades adicionales a las esperadas.
Sin embargo, excluyendo el 2020 por la pandemia del COVID, el volumen sería el más bajo para todo un año desde el 2012, cuando se colocaron 988 mil 42 unidades.
“El resultado del mes de diciembre aún refleja el deterioro del mercado, marcando la sexta tasa negativa de 2021 y la cuarta disminución consecutiva luego de los seis meses previos de avance continuo. Si bien ha mostrado una mejoría contra el mes inmediato anterior, estos resultados reflejan todavía restricción por la falta de inventario, lo que ha generado importantes impactos en las cadenas de suministro de diversas industrias”, comentó Guillermo Rosales Zárate, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
La AMDA destacó que las 97 mil 365 unidades vendidas en diciembre, significaron un incremento de 14 mil 536 unidades vendidas contra el mes de noviembre de 2021, lo que significó un aumento del 17.5 por ciento.
La AMDA y la AMIA dieron a conocer el reporte de venta total de vehículos ligeros nuevos por marca, donde Nissan se ubica en primer lugar con un 20.1 por ciento de participación.
Los tres retos del sector automotor este año
Para la AMDA y la AMIA, los principales retos para las empresas del sector en este año serán el aumento de precios, el desabasto de semiconductores y la falta de inventario que inhibe la venta de vehículos y encarece la producción y el armado.
“Hemos tenido una inflación alta y esto incide en los costos de todo y obviamente la industria automotriz no es excepción a la misma. Entonces, pues estaremos, obviamente cada armadora en lo particular, muy vigilante de esta circunstancia”, advirtió José Zozaya, presidente de la AMDA.
Respecto al tema de desabasto de chips explicó que “quizás para el segundo semestre se verá algo ya más estable en el suministro de semiconductores”. Sin embargo, dijo que se prevé que será hasta 2023 cuando la producción de vehículos se estabilice.
Por su parte, Guillermo Rosales Zárate, presidente ejecutivo de la AMDA reconoció que este año continúa la previsión de alta incertidumbre al respecto del nivel de surtimiento y disponibilidad de producto en el mercado, por lo que la expectativa de venta para 2022 se prevé que podría alcanzar un millón 39 mil 375 unidades, es decir un avance de 2.4 por ciento por ciento.
“El principal factor continúa siendo la falta de inventario, así también se continúa observando un nivel elevado en los índices de precios tanto el general con un alza de 7.45 por ciento, como de vehículos con un incremento de 8.68 por ciento en comparativa anual con datos a la primera quincena de diciembre 2021″, detalló la AMDA.