Luego de dos semanas de incertidumbre, sin actividad cerebral, la mexicana Hilda Marcela Cabrales Arzola murió el 28 de noviembre de 2021, un día antes de que cumpliera 27 años.

Según confirmó a diversos medios su padre, Luis Cabrales, la familia decidió donar los órganos de la joven arquitecta para ayudar a entre 9 y 12 personas.

“Me despido de ella, diciéndole que se vaya sin ninguna preocupación. Diciéndole que cada día del resto de mi vida voy a estar esperando para volverla a ver y abrazarla y decirle lo mucho que la amo. Y que gracias por estos 27 años de haber sido nuestra niña”, dijo Cabrales a Univision Noticias.

Marcela había sido abandonada afuera del hospital Kaiser Permanente de Los Ángeles la madrugada del 14 de noviembre, inconsciente a causa de una sobredosis de heroína, luego de que saliera la noche previa con su amiga Christy Giles, quien fue abandonada un rato antes en la acera de otro hospital de la ciudad y fue declarada muerta en el momento.

A la fecha, el caso no está resuelto y la teoría de las familias de ambas mujeres es que las dos fueron drogadas en contra de su voluntad, luego de que habían salido a una fiesta. Con ellas, iba una tercera mujer que, según reportes, no ha querido ser identificada, pero cooperó con las autoridades.

Según el testimonio de la tercera, las dos víctimas decidieron ir a otra fiesta con tres personas que conocieron en el lugar a las 4 a.m. y actuaban con coherencia cuando se despidieron. Unas horas después, según reportes de diversos medios, Giles fue abandonada en el hospital Southern California, de Culver City, en un carro negro por hombres encapuchados, mientras que a Hilda la dejaron en el Centro Médico Kaiser Permanente un poco después, presumiblemente por el mismo vehículo.

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