Desde la tribuna del Congreso local, el diputado sonorense Fermín Trujillo Fuentes, del Partido Nueva Alianza (Panal), admitió abiertamente que en su formación como servidores públicos todos los políticos se vuelven delincuentes, incluido él mismo.
El legislador hizo esa confesión durante la lectura del posicionamiento de la bancada del Panal al iniciar la revisión de la Cuenta Pública 2020, la penúltima del sexenio de Claudia Pavlovich.
“Nadie nace siendo delincuente, todos nacemos inocentes; todos y todas nacemos inocentes, lo que significa que en el trayecto de la formación de servidores públicos nos hacemos delincuentes”, afirmó.
Fermín Trujillo Fuentes arribó al Congreso sonorense en 2015, de la mano de Claudia Pavlovich con el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y por la vía plurinominal.
Ya en 2018 contendió por conservar la curul siendo el único político que le ganó un escaño al “tsunami” morenista, que hace tres años logró la victoria electoral en 20 de 21 distritos.
Para este 2021 se valió de la candidatura común de la coalición “Juntos Haremos Historia”, conformada por Morena, Panal, Partido del Trabajo (PT) y Verde Ecologista de México (PVEM), con lo que se quedará en el Parlamento sonorense hasta 2024. Al final tendrá una trayectoria de nueve años ininterrumpidos como legislador.
El político originario de Ures también fue diputado federal del Distrito 2 –de 2003 a 2006–, y a finales de 2008 y principios de 2009 se convirtió por un brevísimo tiempo en senador de la República, en suplencia del titular, el priista Alfonso Elías Serrano, quien dejó la Cámara Alta para contender por la gubernatura de Sonora, que a la postre perdió con el panista Guillermo Padrés.
Fue miembro del PRI de 1985 a 2008; en este mismo año se cambió al Panal y ahora defiende a ultranza los postulados de la “4T” en la entidad.
También es docente de profesión con especialidad en Ciencias Naturales, cuenta con una maestría en Pedagogía y es miembro del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), sección 54.