Estados Unidos informó este lunes que extenderá las restricciones en sus fronteras terrestres con México y Canadá que impiden viajes no esenciales como el turismo por parte de extranjeros, pese a la decisión de Ottawa de permitir el ingreso al país a los estadounidenses vacunados.

Canadá permite desde el 9 de agosto que los estadounidenses que hayan completado su esquema de vacunación entren al país para viajes no esenciales.

Estados Unidos ha extendido las restricciones extraordinarias en las fronteras con sus dos vecinos mensualmente desde marzo de 2020, cuando las impuso para afrontar la pandemia de Covid-19.

La nueva extensión será hasta el 21 de octubre, dijo el lunes a periodistas el coordinador de la Casa Blanca para el Covid-19, Jeff Zients.

EU abre puertas a vacunados

El gobierno de EU anunció este lunes que permitirá a partir de comienzos de noviembre la entrada en el país de los viajeros internacionales, incluidos los de la Unión Europea (UE), el Reino Unido, China y Brasil, que estén vacunados con el esquema completo.

Los viajeros deben mostrar prueba de vacunación y un test negativo realizado tres días antes del viaje, indicó Jeff Zients en conferencia de prensa virtual.

“Este nuevo sistema de viaje internacional sigue las recomendaciones de la ciencia, para mantener los vuelos aéreos internacionales a EU seguros, al requerir los extranjeros estar completamente vacunados para volar a EU e implementa adicionales y estrictos protocolos de seguridad”, remarcó Zients.

Estas restricciones de viaje, aplicadas inicialmente por el expresidente Donald Trump (2017-2021), estaban en vigor desde el inicio de la pandemia en 2020 y habían sido mantenidas por el actual mandatario, Joe Biden, quien llegó a la Casa Blanca en enero de este año.

Los viajeros internacionales completamente vacunados no deberán cumplir cuarentena una vez llegan a territorio estadounidense, pero sí que deberán facilitar datos de contacto para facilitar el rastreo en caso de contagio.

Zients subrayó, no obstante, que para los estadounidenses no vacunados deberán presentar un test negativo un día antes de su salida, y volver a someterse a la prueba una vez en Estados Unidos.

Las prolongadas restricciones de viaje del gobierno estadounidense habían sido especialmente criticadas por los socios europeos, donde el porcentaje de vacunación es bastante mayor que el existente en EU.