Mario Gutiérrez Vega | Latinus
Alfonso Durazo Montaño negó que en su carrera política haya escondido “algo de su patrimonio”, sin embargo nunca ha transparentado, ni como funcionario ni ahora como candidato de Morena a la gubernatura de Sonora, las nueve propiedades que están a nombre de la empresa familiar Inmobiliaria Alta Sierra.
“Jamás he escondido algo sobre mi patrimonio porque me lo he ganado con mi legítimo trabajo”, señaló Durazo a través de un comunicado emitido en respuesta al reportaje Durazo bienes raíces transmitido en Loret Capítulo 45.
El candidato de Morena al gobierno de Sonora reconoció que su esposa y sus dos hijos son accionistas de Inmobiliaria Alta Sierra y que él también fue parte de esta empresa. Confirmó que los registros públicos avalan su participación como administrador único de Inmobiliaria Alta Sierra y que desde esa posición fue el encargado de comprar las propiedades que están a nombre de la empresa.
Durazo presumió en su comunicado que es el único candidato a la gubernatura de Sonora que ha presentado la declaración “3 de 3” ante el Comité de Participación Ciudadana del Sistema Estatal Anticorrupción y la organización Transparencia Mexicana.
El candidato de Morena la entregó hace apenas dos días, el miércoles 19 de mayo, y en ella se muestran inconsistencias en lo que ahora reporta con los registros históricos de sus últimas declaraciones como funcionario federal.
En esta nueva declaración patrimonial Durazo sigue ocultando las nueve propiedades adquiridas a través de Inmobiliaria Alta Sierra.
En la “3 de 3” entregada el miércoles transparenta la posesión de seis inmuebles, lo que no coincide con su última declaración patrimonial como funcionario público federal, de diciembre de 2020, en la que sólo reportó dos bienes: uno es su departamento en la exclusiva zona de Polanco, de la Ciudad de México, y el otro es un espacio comercial en Hermosillo, que compró en 2003 cuando era secretario particular del presidente Vicente Fox.
Estas dos propiedades las declara ahora en su “3 de 3” como candidato de Morena, pero además reintegra a su patrimonio una casa que compró en 1995 en la Cerrada de San Agustín, en Hermosillo, y que en sus declaraciones de 2018 y 2019 como funcionario había reportado ante la Secretaría de la Función Pública, pero que en 2020 dejó de mencionar.
Lo mismo sucede con una casa ubicada en Paseo de Los Zafiros, en el exclusivo fraccionamiento La Jolla, en Hermosillo, donde Durazo ha mantenido su domicilio electoral en las últimas dos décadas. Después de incluirla en 2018 y 2019 como una de sus propiedades, Durazo no reportó la vivienda en su declaración patrimonial del 31 de mayo de 2020 ni en la de diciembre del año pasado. Sin embargo, ahora en su “3 de 3” como candidato de Morena la reaparece.
En su declaración “3 de 3” presentada el miércoles, Durazo reporta la compra de un nuevo edificio el 28 de diciembre de 2020, por el cual pagó 6 millones de pesos. Y también manifiesta la posesión de un local comercial que le fue heredado por su mamá en 2012.
El exsecretario de Seguridad Ciudadana federal indica en su comunicado que los precios “están fuera de toda realidad con lo planteado en el reportaje”. Basta hacer una consulta a corredores inmobiliarios en Sonora para conocer que, en conjunto, las propiedades alcanzan los 214 millones de pesos en valor actual de mercado. El rancho, las casas, edificios y espacios comerciales que posee Inmobiliaria Alta Sierra se encuentran en zonas comerciales privilegiadas y de alta plusvalía de Hermosillo.
Lo que Durazo declara como valor de sus bienes es su precio de adquisición, no el valor comercial y actual de estos bienes en el mercado inmobiliario.
