“¡No he hecho nada malo, nada, nada!”, respondió Andrés Roemer al periodista Amir Shuan, del Canal 13, al ser cuestionado por estar en Israel, pese a las denuncias de abuso sexual contra mujeres, incluida una en ese país.
El escritor negó que se esté escondiendo de la orden de aprehensión que se giró en su contra por esos ilícitos.
El periodista israelí se encontró a Roemer en calles de Israel, en Tel Aviv, y le preguntó sobre su presencia en el país.
–¿Es propio que uses tu judaísmo para permanecer en Israel y escapar de México? – le cuestionó Amir Shuan.
–No estoy escapando de ningún lado, lo siento. Vengo muy seguido.
En su defensa, Roemer dijo que más de 400 mujeres lo apoyan, lo conocen y le creen.
Luego, entró a un bar y policías lo abordaron.
“¡No me toquen!”, lanza Andrés Roemer en la grabación y posteriormente se le ve hablando por teléfono celular.
Caso Roemer
El pasado 5 de mayo la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) giró una orden de aprehensión contra el escritor y diplomático por el delito de violación sexual.
Dos días después, el 7, en una carta firmada por Talía Margolis, Ana Paula García S. R. L., Fernanda Lascurain, Melina Islas, Mariana Flores, Carmen Urquieta y más de 60 organizaciones feministas, las mujeres pidieron al embajador de Israel en México, Zvi Tal, que por medio de sus buenos oficios se proporcione al gobierno de ese país la información completa sobre el caso de los abusos sexuales de Andrés Roemer.
“Confiamos en que, teniendo pleno conocimiento de esta situación, Israel tomará una posición contundente para proteger a las mujeres en su país”, tomando en cuenta las más de 60 denuncias contra Andrés Roemer, para que no retome sus agresiones sexuales, ahora en Israel, apuntaron.
Asimismo, señalaron que hicieron un llamado enérgico para que escuchen sus historias, crean en ellas y se pueda evitar que Roemer vulnere a más mujeres, porque para ellas sería desgarrador saber de más casos de mujeres violentadas por este sujeto y pudieron haberse evitado.
Así, le manifestaron su alarma porque el 29 de abril se dio a conocer, en medios de comunicación, el relato de una mujer que describe un encuentro con Roemer en Tel Aviv, Israel. Saben también que hay una calle nombrada en su honor, lo cual –subrayaron– es inadecuado para alguien que no puede volver a su país sin que implique un proceso penal privado de la libertad.
“Nuestra mayor inquietud es que Roemer se valga del desconocimiento que le da una calle con su nombre para continuar ejerciendo acciones en contra de la dignidad y los derechos de las mujeres, ahora en territorio de Israel”.
Desde el 15 de febrero salieron a la luz las denuncias públicas contra el escritor, mismas que hasta el día de hoy suman más de 60.