A lo largo del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, numerosos funcionarios decidieron bajarse del barco de la 4T. La mayoría lo hizo en medio del escándalo, poniendo en evidencia las discrepancias que existen al interior de la administración federal o incluso, después de diferendos con el propio presidente de la República, quien ha reconocido públicamente, que exige una lealtad absoluta de sus colaboradores.
El caso más reciente de los encontronazos con la figura presidencial, es el del David Colmenares Páramo, titular de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), luego de que tuvo que rectificar su informe sobre el costo de la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), que se ubicaba en Texcoco.
La ASF estimó que la cancelación del NAIM ascendía a 331 mil millones de pesos, cuando el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador había indicado que el costo total de la suspensión sería de 100 mil millones de pesos.
La publicación del informe, que además revela opacidades y derroches de numerosos programas sociales y en otras de las obras insignias del gobierno lopezobradorista que ascienden a 44,000 millones de pesos, desató una serie de reacciones, criticando la administración que dice estar aplicando una “austeridad republicana”.
Fue entonces que vino la reacción desde Palacio Nacional. En la mañanera del 22 de febrero, un furioso López Obrador llamó a la ASF a rectificar la información, al asegurar que sus señalamientos “están mal” y “son exagerados”. Aseguró que él posee “otros datos” y dijo que el gobierno federal detallará el balance del ejercicio de su administración.
“Le están dando mal la información a nuestros adversarios y yo creo que no deben de prestarse a esas campañas”, agregó el mandatario.
Tras la arremetida presidencial, la ASF rectificó. En un comunicado, la Auditoría indicó que había inconsistencias en el cálculo realizado durante la revisión de la cancelación del megaproyecto, por lo que se está realizando una revisión exhaustiva.
“Al momento se ha detectado ya que dicho monto es menor a lo estimado inicialmente por una deficiencia metodológica”, señaló el organismo.
Sin embargo, en una entrevista radiofónica con el programa Fórmula Financiera, Colmenares aseguró que no se retractó.
“No me retracté, no me retracté en lo absoluto, lo que planteamos es que tuvimos fallas metodológicas”, sostuvo.
Lamentó que primero haya recibido aplausos por su trabajo y después puros golpes. “Quiénes no tiene una posición primero nos aplaudieron el sábado, luego vino el lunes y el martes y nos golpearon, iba a decir otra palabra, pero está prohibido”, aseveró.
La mañana de este jueves 25 de febrero, López Obrador dijo que solicitará a la Cámara de Diputados investigar a la Auditoría Superior de la Federación (ASF), por considerar que el informe de la cuenta pública 2019 fue tendencioso y falseó la información sobre el uso de los recursos públicos.
“No quiero señalar a nadie… no es un asunto personal contra alguien, pero pido que se haga la investigación y que se aclare este asunto es que imagínense, se da conocer este informe, en especial este documento del aeropuerto y vean cómo lo manejó la prensa vendida o alquilada, los medios de información que están en contra nuestra porque antes se beneficiaban cuando el antiguo régimen, vean el escándalo que hicieron, hasta intelectuales orgánicos”, dijo el mandatario.
La respuesta al llamado presidencial llegó de inmediato. Los diputados ya citaron a David Colmenares junto con los auditores especiales de este órgano autónomo, para que comparezcan ante la Cámara de Diputados con la finalidad de conocer y ampliar información de los informes individuales de la Cuenta pública 2019 que entregaron a San Lázaro.
De acuerdo con la columna del analista Mario Maldonado que se publica en El Universal, el presidente ya pidió la cabeza del auditor.
El columnista aseguró que la historia de la elaboración del informe cruza por una serie de cálculos políticos y presuntas revanchas que apuntan hacia el titular de la ASF, David Colmenares Páramo, y a otros funcionarios de su primer círculo.
“Colmenares quiso cabildear una muy adelantada reelección con personajes que considera poderosos del presente gobierno, pero el resultado fue un escándalo que ocasionó que el presidente López Obrador pidiera su cabeza”, resaltó el periodista.
Maldonado aseguró que de acuerdo con fuentes cercanas a la ASF, Colmenares y su primer círculo decidieron administrar la información para beneficiar a sus aliados y, de paso, tomar revancha por viejas y nuevas rencillas que mantienen con ciertas figuras del gabinete presidencial. Y es que algunos de los auditores como Eber Betanzos y Víctor Andrade tienen deudas añejas con la secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval.
Pero las disputas y los malos cálculos políticos por parte de Colmenares Páramo y su primer círculo, ocasionaron que tengan un pie fuera de la Auditoría Superior de la Federación, el cual es un órgano autónomo.
LOS FUNCIONARIOS QUE HAN DEJADO LA 4T
Mónica Maccise Duayhe
La titular del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), dejó su cargo en medio de un fuerte escándalo que involucró a la familia del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Y es que, días antes de su renuncia ocurrida el 18 de junio, el Conapred convocó a un polémico foro sobre racismo y clasismo en México en el que uno de los oradores principales era el influencer Chumel Torres.
Miles de personas mostraron su rechazo e indignación al recalcar que el también youtuber hacía chistes tanto racistas como clasistas de manera constante. Pero entre las reacciones destacadas fue la de la esposa del mandatario, Beatriz Gutiérrez Müller, quien, sin mencionar el nombre de Chumel, se expresó así en su cuenta de Twitter
“¿A este personaje invitan a un foro sobre discriminación, clasismo y racismo? Sigo esperando una disculpa pública de este individuo sobre los ataques a mi hijo menor de edad. @CONAPRED #ConLosNiñosNo”, escribió.
La escritora acompañó su mensaje con la invitación al foro, en donde marcó el nombre de Chumel y una captura de pantalla de un video de Torres llamado “El palacio de chocoflan”, con el que hacía referencia a Jesús López, el hijo Beatriz Gutiérrez y el presidente de México.
La presión llegó a tal grado que el foro terminó por cancelarse. Incluso, en conferencia de prensa matutina, López Obrador desconoció la existencia del Conapred y sugirió que desaparecería. A los pocos días, se dio a conocer la renuncia de Maccise Duayhe.
A través de un comunicado, Mónica Maccise, aseguró que su renuncia fue una decisión personal y voluntaria, además, expresó su deseo para que esta institución se fortalezca y haga un aporte significativo en defensa de los derechos humanos.
Asa Ebba Christina Laurell
La subsecretaria de Integración y Desarrollo de la Secretaría de Salud, Asa Ebba Laurell, dimitió en medio de la pandemia por coronavirus, luego de dar a conocer que tenía fuertes diferencias con el titular de la dependencia, Jorge Alcocer, y en específico, por la pretensión de desaparecer el área.
La ex funcionaria -muy cercana a Andrés Manuel López Obrador desde los tiempos en que él fue Jefe de Gobierno de la Ciudad de México- se encargó desde el inicio de la administración de hacer el diagnóstico de las condiciones en que se encontraban los servicios médicos en los estados de la República y determinar las necesidades por cubrir.
La doctora e investigadora denunció en un artículo publicado el 18 de junio en el diario La Jornada, que el secretario de Salud, Jorge Alcocer, y el titular del Instituto de Salud para el Bienestar, Juan Ferrer, pretenden desaparecer el área que ella encabezaba, hecho que calificó de “una amenaza para el futuro”.
Señaló que ambos funcionarios pretenden desmontar la Subsecretaría de Integración y Desarrollo del Sistema de Salud y alertó que hacerlo sería un error, ya que tiene un papel fundamental para el Sistema Nacional de Salud.
“Como se observa, la SIDSS tiene un papel crucial en las tareas de mejoramiento y expansión del SNS y el encargo de uniformar la APS-I Mx, así como avanzar hacia el sistema único y público de salud. La pretensión del secretario de Salud, Dr. Jorge Alcocer, apoyado por el titular del Insabi, el antropólogo Juan Ferrer, aún más inexperto sobre el sistema de salud mexicano, de desmontar la SIDSS es una amenaza para el futuro. La SPP, con su estructura vertical de programas, tampoco ha mostrado tener una visión de futuro”, escribió la doctora.
Mara Gómez Pérez
La noche del mismo 18 de junio, se publicó la versión de que Mara Gómez Pérez presentaría su renuncia al día siguiente a la presidencia de la Comisión Especial de Atención a Víctimas (CEAV), luego de seis meses de estar en el cargo.
Su salida ocurrió luego de que familiares de víctimas de la violencia mantuvieron un plantón afuera de Palacio Nacional exigiendo validen sus derechos.
Por ello, el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, reenvío la carta que le entregaron familiares de desaparecidos a la presidenta de la Mesa Directiva del Senado, Mónica Fernández, y el presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal.
Al dejar la dirección de la CEAV, Mara Gómez aseguró que renunciaba a su puesto, al considerar que la dependencia estaba perdiendo su “vocación humanista”, toda vez que -dijo- la Comisión había sido pervertida, al tiempo que la impartición de justicia “fue reemplazada por una fórmula clientelar, centrada en el reparto de recursos económicos, usando el dinero para pagar la falta de verdad”.
Candelaria Ochoa
Candelaria Ochoa era la encargada de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres. Su renuncia ocurrió el 30 de junio a petición de la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, sin precisar los motivos de esta solicitud.
En entrevista con el diario El Financiero, Candelaria Ochoa aseguró que su renuncia no fue una decisión propia.
“A mí no me pidieron la renuncia de manera directa, se la pidió la secretaria (Olga Sánchez Cordero) al subsecretario. Yo entiendo que se conforman equipos, con los que se tiene confianza o no se tiene, y yo creo que yo no formé parte de ese equipo”, explicó. “Yo no supe los motivos (de su “renuncia), desafortunadamente no se me dijeron”, aseguró
Ochoa continúa con su activismo en favor de las mujeres y manifiesta su apoyo al gobierno de López Obrador.
Javier Jiménez Espriú
La salida de Javier Jiménez Espriú como titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) ocurrió en medio de fuertes disputas con el presidente Andrés Manuel López Obrador, luego de que el mandatario determinara que la Secretaría de Marina se encargaría de controlar los puertos del país, lo cual estaba a cargo de la SCT.
Ante la negativa de Jiménez Espriú, quien ya había tenido algunos roces con el presidente debido a que su responsabilidad como secretario fue subordinada a mandos militares en la construcción del aeropuerto de Santa Lucía y un tramo del Tren Maya, decidió presentar su renuncia.
“El motivo, que le he expresado personalmente, es mi diferendo por su decisión de política pública, de trasladar al ámbito militar de la Secretaría de Marina, las funciones eminentemente civiles de los Puertos, de la Marina Mercante y de la formación de marinos mercantes, que ha estado a cargo de la SCT desde 1970”, detalló en una carta.
Por su parte, Andrés Manuel López Obrador anunció que la dimisión de Jiménez Espriú se debía a un “diferendo”. A través de un video, el presidente explicó la salida del titular de la SCT.
“Estamos en la oficina en Palacio Nacional, quiero informarles que acepté la renuncia del ingeniero Javier Jiménez Espriú como secretario de Comunicaciones y Transportes”, dijo López Obrador.
“El ingeniero Jiménez Espriú ha estado ayudándonos durante todo este tiempo, es una gente honorable, un profesional destacadisimo, tuvimos un diferendo que solo se da entre hombres libres y con criterio, acerca de la operación de los puertos”, dijo el Jefe del Ejecutivo.
“El ingeniero Jiménez Espriú sostiene que deben de ser manejados los puertos por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes; y yo creo que por la circunstancia actual, por la corrupción que prevalece en los puertos, en las aduanas, y últimamente por el contrabando y droga, necesitamos además de buena administración, de seguridad y de protección en los puertos, y que por ese motivo se requiere del apoyo de la Secretaría de Marina, queremos que esta institución se haga cargo del cuidado de las costas, de las aduanas marítimas de los puertos”, explicó el mandatario.
Víctor Manuel Toledo
Biólogo de profesión, Víctor Manuel Toledo encabezaba la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, hasta que un escándalo lo hizo renunciar a su cargo.
El pasado 5 de agosto, se filtró a medios un audio de origen desconocido en el que el titular de la Semarnat arremetía contra la Cuarta Transformación.
“La 4T como tal, como un conjunto claro y acabado de objetivos, no existe, no existe. Por el contrario, este Gobierno de la 4T está lleno de contradicciones y estas se expresan concretamente en luchas de poder al interior del gabinete que yo lo he notado en varias líneas”, expresó Toledo.
En el audio también se le escuchó decir que tanto López Obrador, como el jefe de Gabinete, Alfonso Romo, y varios ministros más “están en contra” de la agenda ecológica que intenta impulsar la Secretaría de Medio Ambiente.
“No estamos en un gobierno totalmente del lado nuestro; hay contradicciones muy fuertes y yo, la verdad, es que veo muy difícil. No debemos idealizar a la 4T”, dijo Toledo.
Tras la filtración del audio, el presidente evitó pedir su renuncia y dijo que es “normal” que haya diferencias dentro de un Gobierno. ”En el gabinete nuestro hay libertad, hay discrepancias y no hay pensamiento único. Se da la libertad para que todos opinen”, expresó López Obrador.
Sin embargo, la salida de Toledo Manzur ocurrió el 31 de agosto. El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró el 2 de septiembre, que Víctor Manuel Toledo “es una gente honesta” y un “profesional de primera”, pero tuvo que renunciar por motivos de salud, generados por el estrés que ocasiona trabajar en el servicio público.
“Presentó su renuncia (Víctor Manuel Toledo) él es una gente honesta, un profesional de primera, pero está mal de salud, además la actividad pública, el servicio público produce estrés. Antes yo pensaba que el estrés era pues una exquisitez de la pequeña burguesía, pero no, sí existe, y no todos estamos hechos para resistir presiones… Él es una gente , repito, de primer orden, yo diría que el ecologista, ambientalista más culto del país y consecuente del país”, enfatizo.
El mandatario señaló que Toledo Manzur ya le había informado de sus malestares, por lo que decidió dimitir a su cargo como titular de la Semarnat y regresar a la academia.
Jaime Cárdenas Gracia
Otra polémica salida fue la protagonizada por Jaime Cárdenas Gracia, quien llegó a la dirección del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (Indep) en sustitución de Ricardo Rodríguez Vargas, quien dejó el cargo en medio de acusaciones de corrupción.
Cárdenas Gracia era un hombre muy cercano a Andrés Manuel López Obrador. Fue su abogado y representante electoral cuando era candidato a la presidencia de la República, así como consejero electoral del desaparecido IFE.
Pero eso no impidió que Jaime Cárdenas denunciara que el Indep estaba infestado de corrupción motivo por el que presentaba su renuncia.
A través de una contundente carta que hizo pública, explicó su motivo principal para dejar el Indep: su total desacuerdo con la manera en que este organismo se gestiona, haciendo hincapié en las “irregularidades administrativas” que detectó en su paso por la dependencia.
Cárdenas Gracia también señaló la entrega de contratos favorables a “ciertas empresas” dentro de los procesos de valuación, así como falta de liquidez y el desconocimiento del origen de los recursos en la institución.
Pero en lugar de respaldar y sobre todo, mandar a hacer una investigación sobre lo denunciado, López Obrador se fue contra él y dijo que Jaime Cárdenas “no le entró” a limpiar al Indep.
“Limpiar, era lo que tenía que hacer Jaime, pero no le entró. Ayer (1 de septiembre) hablábamos de que para ser servidor público, sobre todo en un proceso de transformación, se requieren ganas, para todo en la vida, convicciones y arrojo y no rendirnos”, aseguró.
Durante su tradicional conferencia en Palacio Nacional, el presidente aseguró que los grandes problemas se enfrentan, “echándose para adelante”, y recalcó que a Cárdenas Gracia le dio miedo e impotencia por no saber manejar las cosas al interior del Indep.
Pero la respuesta de Jaime Cárdenas llegó a través de una entrevista con el periodista Ricardo Rocha en su programa Detrás de la Noticia.
Aseguró que su lealtad con López Obrador y el gobierno federal no era ciega sino reflexiva, y que ahí fue donde comenzaron los problemas. Dijo que aunque el mandatario tenga muchas críticas contra él, lo considera como “un buen presidente”.
Y aunque aseguró que no está desilusionado con la 4T, recordó que cuando ya no estás bien en un lugar, lo mejor es irse.
Alfonso Romo
La última renuncia importante dentro del gabinete de López Obrador, ocurrió el pasado 1 de diciembre. Ese día, Alfonso Romo, Jefe de la Oficina de la Presidencia, anunció su dimisión, sin embargo, aseguró que se mantendría como su principal enlace con el sector privado.
A través de su cuenta de Twitter, López Obrador aseguró que el acuerdo con el empresario de Nuevo León era que estuviera en la función pública por dos años, plazo que se cumplió el 1 de diciembre.
El mandatario federal calificó a su exjefe de la Oficina de la Presidencia como un hombre honesto y comprometido con las causas.
“Poncho está más en mi visión de que lo importante no es el cargo, sino el encargo. Él me ha ayudado y me seguirá ayudando. Es un hombre independiente, honesto, comprometido con las causas justas y además es mi amigo”, afirmó.
El mandatario aseguró que no habrá remplazo para Romo debido a que esa oficina desaparecería, además de mencionar que muchos de los colaboradores, incluido Alfonso Romo, trabajaban sin cobrar.
Alfonso Romo había sido señalado por Víctor Manuel Toledo y de Carlos Urzúa (exsecretario de Hacienda) de concentrar mucho poder político dentro del gabinete federal y bloquear apoyos y proyectos de otras dependencias.
Carlos Urzúa
Una dimisión que causó gran conmoción y hasta ameritó artículos de la prensa extranjera, fue la del Secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, sobre todo, después de que se dieran a conocer sus razones.
El 10 de julio de 2019, Carlos Urzúa hizo pública su carta de renuncia en donde explicó que “han habido muchas” discrepancias en materia económica y “porque en esta administración se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento”.
En ese sentido, el ex secretario de Hacienda se dijo “convencido de que toda política económica debe realizarse con base en evidencia, cuidando los diversos efectos que ésta pueda tener y libre de todo extremismo, sea éste de derecha o de izquierda. Sin embargo, durante mi gestión las convicciones anteriores no encontraron eco”.
Aunado a ello, precisó, “me resultó inaceptable la imposición de funcionarios que no tienen conocimiento de la Hacienda Pública”, lo cual dijo haber sido motivado por personajes influyentes del actual gobierno con un patente conflicto de interés. Después se supo que uno de estos “personajes influyentes” era Alfonso Romo, Jefe de la Oficina de Presidencia.
Germán Martínez Cázares
El 21 de mayo de 2019, a sólo cinco meses de haber comenzado el gobierno de López Obrador, el titular del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Germán Martínez, presentó su renuncia debido a las diferencias presupuestarias que se suscitaron con la Secretaría de Hacienda.
Mediante una carta difundida por el propio Instituto, la cual causó un terremoto en la política interna del país, Martínez cuestionó las políticas de austeridad republicana y señaló a Hacienda de incidir de manera “perniciosa” en su trabajo. La dimisión se presentó en medio de los recortes a las dependencias de gobierno para implementar el “plan de austeridad Republicana” que derivó en faltas de pago a médicos y en escasez de medicamentos. Esta última problemática aún persiste.