Puede sonar extraño, pero el partido Redes Sociales Progresistas (RSP), de reciente creación, está por lograr algo inédito en las votaciones internas a fuerza de un plan mediático, entre los que aparecen tres exponentes insignias de la lucha libre profesional, a quienes les busca un destino en la política.

A falta del anuncio oficial, Tinieblas, ya en el retiro; Blue Demon Jr. y Carístico se perfilan para contender por las alcaldías Venustiano Carranza, Gustavo A. Madero y Cuauhtémoc, respectivamente, en las elecciones del próximo 6 de junio.

Sin embargo, la insólita medida mediática causa controversias respecto del uso de la máscara de los luchadores, ya sea durante las campañas políticas, o en caso de ser electos en el cargo de alcalde.

También sería la primera ocasión en la historia de la política que deportistas encapuchados asuman un cargo público.

Ante esto, los enmascarados tienen claro su decisión: asesorados por su partido político coinciden en que “no existe una ley” que los obligue a despojarse de sus emblemáticas caretas, posición que defienden a como dé lugar por la magia que envuelve su singular actividad de mantener la incógnita de su personaje.

En entrevistas con Proceso, cada luchador asegura por separado que, de acceder a la alcaldía en sus respectivas demarcaciones políticas, lo harán con sus máscaras. Y aclaran que únicamente se despojarán de ellas ante la autoridad que así se los ordene para efectos de validar su identidad.

Hasta ahora, la afición a la lucha libre estaba acostumbrada a ver a estos personajes arriba del ring, justamente por el esmerado secreto de ocultar su identidad detrás de una máscara. Por ese motivo, Tinieblas, Blue Demon Jr. y Carístico se dicen convencidos de que la ciudadanía podrá identificarlos con relativa facilidad por las siguientes características: el registro de su voz, los ojos, las manos, la estatura e, incluso, por la manera de caminar.