Con una votación de 55 a favor, contra 45 en contra, el Senado de Estados Unidos votó este sábado por aceptar la presentación de testigos durante el segundo juicio político contra el expresidente Donal Trump. Cinco republicanos, entre ellos Lindsey Graham, votaron a favor de presentar testigos.
Lindsey Graham, un republicano cercano a Trump, cambió su voto en el último minuto. El abogado de Trump, Michael Van der Veen, dijo que la solicitud era una irregularidad en el proceso, mientras que el fiscal líder, Jamie Raskin, dijo que era perfectamente normal pedir testigos en este punto del procedimiento.
Varios congresistas en Estados Unidos pidieron el viernes por la noche citar a testigos durante el juicio político contra el expresidente Donald Trump después de que la cadena CNN publicara nuevos detalles de una conversación telefónica entre Trump y Kevin McCarthy, el líder republicano en la Cámara Baja, ocurrida durante el asalto al Capitolio del pasado 6 de enero.
Según estos nuevos detalles, corroborados por otros congresistas republicanos, cuando McCarthy se puso en contacto con el entonces presidente para que pidiese a sus seguidores que suspendieran el asalto, este se negó.
“Bueno, Kevin, supongo que esta gente está más enfadada por las elecciones que tú”, le habría respondido Trump a McCarthy.
El contenido de esta llamada salió a la luz una vez finalizada la cuarta jornada del juicio político contra Trump en el Senado, centrada en la defensa del exmandatario (que apenas utilizó 3 de sus 16 horas disponibles) y el turno de preguntas y respuestas.
Ese turno de preguntas y respuestas, sin embargo, también generó malestar entre senadores republicanos, ya que los abogados de Trump pusieron en duda que uno de los legisladores alertara al presidente de que su vicepresidente, Mike Pence, estaba en peligro.
El senador en cuestión, Tommy Tuberville, recibió una llamada de Trump durante el asalto que tenía como objetivo incitarlo a que retrasara la certificación de la victoria de Joe Biden, pero este respondió que Pence acababa de ser desalojado.
Minutos después, Trump publicó un mensaje en Twitter criticando a su vicepresidente mientras la turba asaltaba el Congreso al grito de “colguemos a Mike Pence”.
El senador demócrata Sheldon Whitehouse reaccionó este viernes por la noche a los nuevos acontecimientos y abogó por “suspender el juicio y citar a McCarthy y Tuberville bajo juramento”.
“El día de mañana se acaba de volver mucho más interesante”, dijo en Twitter.
El senador demócrata Chris Van Hollen también apoyó en una entrevista con CNN citar a testigos.
Por su parte, la congresista republicana Jaime Herrera Beutler, una de las 10 que votó junto a los demócratas a favor del impeachment en la Cámara Baja, instó en un comunicado a los funcionarios de Trump a que digan lo que saben.
“A los patriotas que estaban al lado del expresidente mientras sucedían estas comunicaciones, o incluso del ex vicepresidente, si tienen algo que añadir, este sería el momento”, dijo Beutler, quien corroboró el contenido de la llamada entre Trump y McCarthy.
Los dos partidos habían optado por un juicio rápido, en principio sin testigos, ya que los demócratas quieren centrarse en la agenda legislativa de Biden y los republicanos pasar página del asalto lo antes posible.
Para condenar a Trump se necesitaría que 17 de los 50 senadores republicanos voten junto a los demócratas en contra del exmandatario, algo que hasta este viernes parecía altamente improbable.