En China ya se comenzaron a realizar pruebas anales para la detección del COVID-19, reveló The Washington Post.
Autoridades en China ya iniciaron a tomar muestras anales a residentes de algunos barrios de Pekín en los que ya se confirmaron casos positivos por el nuevo coronavirus.
Esta innovadora prueba que en palabras del subdirector del Departamento de Enfermedades Respiratorias e Infecciosas del Hospital You’an de Pekín, Li Tongzeng, puede incluso aumentar la tasa de detección de personas infectadas por el virus.
Según especialistas, estas pruebas anales son más exactas que las recolectadas en el tracto respiratorio, debido a que los rastros del virus que se encuentran en dicha zona del cuerpo pueden durar más.
El método consiste en colocar en el ano un hisopo de entre tres a cinco centímetros empapado en solución salina, el cual recoge parte de heces para después ser analizadas en un laboratorio.
China ya probó este procedimiento en pequeños grupos, publicando los resultados en la revista Future Microbiology de agosto pasado.
En el documento se detalló que pacientes que iban recuperándose del COVID-19, dieron positivo al virus en las muestras anales a pesar de que resultaron negativos en las pruebas de hisopos del tracto respiratorio.