La Administración General de Aduanas (AGA), en coordinación con elementos de la Guardia Nacional (GN), informaron que decomisaron 5,420 cartuchos para arma de fuego de diferente calibre en la Aduana de Nogales, Sonora, procedentes de Tucson, Arizona, Estados Unidos.
Durante la tarde del domingo 24 de enero, la dependencia dirigida por Horacio Duarte Olivares informó que derivado de trabajos de inteligencia en coordinación con la GN, el personal verificador activo en la Garita 1 “Puerta México” del estado de Sonora fue quien detectó la munición que pretendía adentrarse a territorio mexicano; sin embargo, tras una inspección, esto no ocurrió.
Las tareas de vigilancia en la frontera tienen intenciones preventivas, pues cerca del 60% de las armas que ingresan a tierra azteca provienen de EEUU, de tal modo que el cuidado fronterizo, desde hace dos administraciones federales, juega un papel preponderante para la seguridad nacional.
En el reporte de la AGA se precisó que el material confiscado se encontró a bordo de una camioneta gris marca Jeep, el cual estaba en cajas de cartón dentro de la cajuela. Aunado a esto, se proporcionaron fotografías que ratifican lo reportado por los colaboradores de la dependencia adscrita al Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Como parte del protocolo de seguridad establecido para prevenir el tráfico de armas, explosivos y municiones, se dio aviso a la Fiscalía General de la República (FGR) a fin de integrar la carpeta de investigación correspondiente.
El tráfico de armas de Estados Unidos a México es un aliciente que se ha investigado desde distintas vertientes, pues de acuerdo con Roxana Juárez Parra, ex directora nacional adjunta de la Unidad Especializada en Terrorismo, Acopio y Tráfico de Armas de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SIEDO), el 58.12% de armas que circulan en el país son de procedencia estadounidense.
Asimismo, señaló que existe otro mercado que se está posicionando a través de la frontera sur, particularmente por el estado de Chiapas, y son las armas que provienen de Centro y Sudamérica; aunado a esto, también afirma que el 19.14% de las armas en el país son armas artesanales o con datos inválidos; 13.16% son armas sin vínculo a EEUU, y el resto se divide en porcentajes menores entre Armas de Centroamérica, con número de serie borrado y pendientes de rastrear.
Esta información solamente prioriza los trabajos aduanales en materia de vigilancia y prevención de tráfico de armas, pues las organizaciones criminales necesitan recurrir al mercado extranjero para poder abastecerse tanto de armas nuevas como de cartuchos para poder accionarlas en México y continuar alimentando los círculos de violencia establecidos en el país, principalmente por el narcotráfico.
Ante este dato, la experta explicó que las armas cortas corresponden más a un tipo de delincuencia de menor impacto, como robo a transeúntes, y que las armas largas pertenecen a criminales de alto nivel, como sicarios o miembros de cárteles de las drogas. Respecto a las armas largas, en otra gráfica explicó que los estados con más armas confiscadas son Tamaulipas, Sonora, Coahuila, Jalisco, Michoacán, y Sinaloa.
Finalmente, durante la conferencia virtual “Tráfico y control de armas en la agenda México-Estados Unidos” de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), señaló que, derivado de una nueva estrategia durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, los aseguramientos se redujeron a casi la quinta parte de los que se registraron con la administración de Felipe Calderón.