La demócrata Kamala Harris hizo este miércoles historia al jurar como vicepresidenta de Estados Unidos, convirtiéndose en la primera mujer, la primera afroamericana y la primera persona de origen asiático en llegar a este puesto en el país.
Juro solemnemente que apoyaré y defenderé la Constitución de Estados Unidos contra todos los enemigos, extranjeros y domésticos; que mantendré una fe real en esto mismo”, comenzó Harris, que juró con la ayuda de la jueza Sonia Sotomayor, la primera magistrada latina del Tribunal Supremo federal.
El juramento es una fórmula fija que pronuncian todos los vicepresidentes cuando juran el cargo.
Al igual que sus predecesores, Harris terminó su juramento con el compromiso de que cumplirá “bien y fielmente los deberes del puesto”, en la ceremonia que se celebra en la escalinata oeste del Capitolio del país en medio de estrictas medidas de seguridad.
La que hasta ahora había sido senadora por California y que el lunes renunció a ese cargo juró el puesto de vicepresidenta poco antes de que Joe Biden haga lo mismo como presidente, frente al jefe del Tribunal Supremo, el juez conservador John Roberts.
Harris juró con la mano encima de dos Biblias, como es tradición: una de ellas perteneció a una amiga de su familia, Regina Shelton, y la segunda fue propiedad del fallecido juez Thurgood Marshall, que fue el primer afroamericano que formó parte del Tribunal Supremo y es uno de los grandes referentes de la vicepresidenta electa.