El presidente Donald Trump aseguró el jueves que la transición del poder a Joe Biden será pacífica y ordenada, aunque no dijo nada sobre amigable y ahora sabemos por qué.
El mandatario de EU adelantó este viernes que no asistirá a la toma de posesión de su sucesor, que tradicionalmente se realiza en el Capitolio, sitio que fue atacado por un grupo de sus simpatizantes durante la tarde del miércoles.
Con ello, Trump romperá nuevamente con una tradición de la política estadounidense, aunque está lejos de ser el único presidente saliente de EU en realizar esta acción.
Este es el grupo reducido de mandatarios estadounidenses al que se unirá el republicano:
John Adams
El segundo presidente en la historia de EU se ‘saltó’ la inauguración del término de Thomas Jefferson en 1801.
El sitio de la Casa Blanca señala que Adams dejó el edificio en la madrugada del día de la ceremonia.
“Si bien Adams nunca explicó por qué se fue, es posible que haya querido evitar un enfrentamiento entre federalistas y demócratas republicanos, ya que esta fue la primera vez que la presidencia se transfirió a un partido opuesto”, agregó.
John Quincy Adams
De tal palo, tal astilla… El hijo de John Adams decidió no asistir a la ceremonia de inauguración del presidente electo Andrew Jackson en 1828.
Ambos políticos se enfrentaron en las elecciones presidenciales cuatro años antes, en las que también compitió Henry Clay. Jackson obtuvo una mayor cantidad de votos del Colegio Electoral y popular, pero no logró la mayoría, por lo que la Cámara de Representantes eligió al presidente.
Clay dio su apoyó -y con ello, los votos del Colegio Electoral que tenía-, a Adams, lo que fue calificado por Jackson como un “trato corrupto”.
Jackson rechazó la propuesta de Adams de utilizar el edifico para las festividades de la inauguración. El presidente saliente dejó la Casa Blanca un día antes de la toma de posesión de su sucesor.
Andrew Johnson
Asumió la presidencia tras el asesinato de Abraham Lincoln en 1865. La historia de EU recuerda a este mandatario por ser el primero que enfrentó un juicio político.
Fue sucedido por el general Ulysses S. Grant, quien era públicamente su némesis. Johnson rechazó asistir a la toma de posesión de su sucesor en marzo de 1869.
Woodrow Wilson
No asistió a la toma de posesión de Warren G. Harding, en 1921, debido a problemas de salud derivados del derrame cerebral que sufrió dos años antes.
A pesar de ese hecho -Wilson permaneció parcialmente paralizado de un lado después del episodio-, se negó a firmar documento alguno sobre su invalidez para desempeñar el puesto de presidente.
Richard Nixon
El penúltimo mandatario de EU que no estuvo en la toma de posesión de su sucesor. Nixon renunció a la Presidencia debido al escándalo del Watergate, y abandonó Washington, D.C., antes de que Gerard Ford tomara protesta.