La obesidad y el sobrepeso son dos problemas de salud graves que registran crecimiento considerable en México y el mundo. Los malos hábitos alimenticios y el sedentarismo influyen de manera considerable para que la persona presente alguno de estos padecimientos.

De acuerdo a los detalles de un comunicado publicado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la emergencia sanitaria obligó a miles de personas a efectuar el llamado home office, por lo que ahora el número de horas frente a la computadora es considerable.

Lo mismo sucede en los distintos niveles educativos que imparten la enseñanza mediante plataformas digitales y en televisión. Las actividades deportivas dejaron de practicarse en las escuelas, incluso los padres de familia poco acuden con sus hijos a parques y jardines por temor al contagio de la Covid-19.

El sobrepeso y la obesidad, además de causar afectación a la salud física, también se presenta en el ámbito emocional, por lo que su atención debe ser integral. No obstante, siempre será mejor prevenir.

El 12 de noviembre se conmemora el Día Mundial contra la Obesidad, efeméride que instauró la Organización Mundial de la Salud (OMS). De acuerdo con datos de esta institución, esos problemas de salud alcanzan proporciones epidémicas al registrar -en 2016- mil 900 millones de adultos y 340 millones de niños y adolescentes en el mundo.

En México, la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018 del Instituto Nacional de Salud Pública indica que siete de cada 10 mexicanos tiene sobrepeso u obesidad. Daniel Pahua Díaz, responsable del Área de Evaluación del Departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina (FM) de la UNAM, explica que el sobrepeso y la obesidad se definen como el aumento en la acumulación de la masa grasa corporal (brazos, estómago, piernas) y visceral (recubrimiento de órganos).

Precisa que la grasa, dentro de ciertos parámetros, es importante para el buen funcionamiento del cuerpo como reserva de energía y precursor de hormonas. “Es impresionante la cantidad de enfermedades que se desprenden de estos padecimientos, como el síndrome metabólico; diabetes, hipertensión, problemas articulares, respiratorios, entre otros. Inclusive con la actual enfermedad de la COVID-19 se asocia un riesgo más alto en personas con sobrepeso y obesidad, porque la situación de salud se complica más”, comenta.

El dato

Cada vez es más común observar a niñas, niños y adolescentes tener un peso mayor al que deberían. El uso prolongado de aparatos electrónicos es también uno de los componentes que ocasiona permanecer por más tiempo sentado, ingerir alimentos y además no hacer ejercicio.