La mañana de este jueves, cientos de cajemenses salieron a las calles a formar filas desde temprana hora en los centros de llenado de garrafones de agua purificada.
Algunos vecinos de la colonia Miravalle que salieron en búsqueda del vital líquido por la mañana señalaron que el corte de agua a todo el sur de la ciudad los había agarrado de improvisto, por lo que decidieron esperar a que abrieran estos negocios y ser de los primeros en poder llevar agua a sus hogares.
Algunos pequeños negocios de este tipo tuvieron que cerrar temprano ya que se quedaron sin agua, mientras que otros hacían su agosto con la venta calle por calle, donde el garrafón suele costar de 5 a 10 pesos mas caro.