De acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (Ensu), llevada a cabo por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la percepción de inseguridad de los mexicanos y mexicanas se redujo en estos meses de pandemia.
Tan sólo en marzo, cuando llegó el COVID-19 a territorio nacional, el 73.4% de la población aseguraba sentirse inseguro en su lugar de residencia; seis meses después, en septiembre, la cifra fue de 67.8%.
Según la encuesta, el confinamiento y las nuevas reglas de convivencia económica, social y laboral impactaron de manera positiva en gran parte de los municipios y ciudades evaluados. No obstante, en ese periodo la percepción de inseguridad siguió siendo mayor en el caso de las mujeres con 72.7%, mientras que para los hombres fue de 62%.
En ese sentido, en 34 localidades la percepción de inseguridad se redujo durante la pandemia, mientras que en 50 se mantuvo igual. Sólo en un municipio aumentó la percepción de inseguridad: Ecatepec, Estado de México.
En ese municipio, el 92.8% de la población de 18 años o más en Ecatepec, Estado de México, se siente insegura, reveló la encuesta del inegi.
Le siguen Fresnillo, Zacatecas; Coatzacoalcos, Veracruz; Villahermosa, Tabasco y Toluca, Estado de México, todos con una percepción de inseguridad mayor al 90%.
En contraste, los municipios en los que los mexicanos se sintieron más seguros fueron San Pedro Garza García, Nuevo León 16.6%; La Paz y Los Cabos, Baja California Sur con 21.8% y 26.9%; Mérida, Yucatán con 22.5%; Cuajimalpa de Morelos, CDMX con 29.1%; y Saltillo, Coahuila con 30.1%.
A nivel nacional, el 21.8% de los hogares contó con al menos una víctima de robo o de extorsión durante el primer semestre de 2020.
Las ciudades con mayor porcentaje de hogares con al menos una víctima fueron Iztacalco, Cuautitlán Izcalli, la alcaldía de Iztapalapa, Aguascalientes y la alcaldía Magdalena Contreras con 34.4, 34%, 33.2%, 33% y 32.7%, respectivamente.
Por otro lado, los lugares públicos donde los mexicanos y las mexicanas se sienten más inseguros son el cajero automático en vía pública, el transporte, el banco y las calles de uso concurrido.
Asimismo, disminuyó la atestiguación de delitos, es decir, la población ha sido testigo de menos robos y asaltos durante la pandemia con una reducción de 3.7 puntos; 2.6 el pandillerismo y 1.8 puntos los disparos y detonaciones.
A pesar de las cifras anteriores, 6 de cada 10 personas asegura que dejó de portar objetos de valor por temor a ser víctima de algún delito; 5 de cada 10 no sale por la noche en su colonia y no deja que los niños y niñas salgan solos.