Durante el debate por la vicepresidencia de los Estados Unidos, el compañero de fórmula del presidente Donald Trump, Mike Pence, se convirtió en el centro de atracción en las redes sociales y no precisamente por su intervención en el evento, sino por la aparición repentina de una mosca, que se posó en su cabello por un periodo considerable de tiempo, sin que el número dos del ejecutivo estadounidense lo notara.
Durante una de las intervenciones de Pence, justo cuando todas las cámaras estaban centradas en el vicepresidente republicano, el insecto hizo su aparición sorpresiva, captando la atención de miles de personas quienes se volcaron a la redes sociales para hacer chistes al respecto.
La mosca estuvo por más de dos minutos en la cabello blanco de Pence, lo que hacia que fuese mucho más notoria su presencia, por lo que los memes no se hicieron esperar.
El momento se convirtió en viral y la mosca ha alcanzado fama mundial al convertirse en protagonista de bromas.
Al finalizar el debate, el candidato demócrata a la presidencia, Joe Biden, publicó una foto con un matamoscas en la mano pidiendo donaciones para hacer “volar” su campaña, esto en un tono de doble sentido debido a que la palabra “volar” en inglés, se escribe fly, al igual que la palabra mosca.
“Contribuye con $5 para ayudar a que esta campaña vuele”, escribió el demócrata, cuyo equipo aprovechó el momento para publicar un tuit con la leyenda: “Ahuyenta moscas y mentiras”.
Apenas dos minutos y tres segundos, según contabilizó el diario The New York Times, bastaron para que la imagen de la mosca sobre el cabello blanco de Pence desatara una avalancha de fotografías desde todos los ángulos del insecto se difundieron en la popular red social Twitter.
El debate de este miércoles tuvo lugar en un auditorio de la Universidad de Utah y estuvo moderado por Susan Page, periodista de diario USA Today.
La discusión transcurrió en medio de medidas extraordinarias de seguridad frente a la COVID-19 debido al reciente positivo del presidente estadounidense, Donald Trump.
Pence y Harris permanecieron sentados a una distancia de 3,7 metros, no se dieron la mano al inicio del debate y se instalaron varias barreras de plexiglás entre ambos, y entre ellos y la moderadora, que se convirtieron en uno de los puntos más comentados en las horas previas al encuentro.