El presidente Andrés Manuel López Obrador propuso al Instituto Nacional Electoral (INE) convocar a voluntarios para que participen en la organización de la consulta ciudadana contra los expresidentes de la República, aun cuando el órgano electoral los emplea en la realización de las elecciones, como es el caso de los funcionarios de casilla.
A decir del mandatario federal, esto permitiría disminuir el costo económico del que será el primer ejercicio formal de democracia participativa y que se calcula en 8,000 millones de pesos. “Es democracia participativa, no hay que pagar”, sugirió el mandatario federal durante su conferencia de prensa este jueves, a la par que pidió que se considere “poner muchas mesas con la participación de la gente”.
Este miércoles, el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, afirmó que el costo de la consulta ciudadana para el próximo año será menor a 8,000 millones de pesos debido a que se podría reutilizar material de la elección del 6 de junio de 2021, pero aclaró que, por ley, la consulta no podrá realizarse el mismo día de la jornada electoral, sino hasta el primer domingo de agosto, como lo establece el artículo 35 de la Constitución.
“Muchos de los gastos, de las actuaciones para que la elección del 6 de junio se lleve a cabo van a servir de asidero para que no tenga que replicarse o duplicarse cuando se haga la consulta popular”, explicó el consejero.
Al respecto, el presidente López Obrador destacó que empatar la consulta con las elecciones del 6 de junio evitaría gastar hasta 8,000 millones de pesos. Por ello respaldó la propuesta del coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, quien propone modificar la Constitución para recorrer la fecha de la consulta al día de la jornada electoral para que además de elegir a sus autoridades, definan si se investiga a los últimos cinco expresidentes.
“Como se propuso en el Senado que se pueda modificar la constitución lo que tiene que ver con la fecha, dejarla como estaba, dejar el artículo 35 en los términos originales, porque incluso la ley reglamentaria vigente habla de hacer la consulta el mismo día de la Constitución”, destacó.
López Obrador destacó que la consulta del próximo año es relevante porque se trata de definir si se investiga a los expresidentes, quienes hasta hace poco no eran tocados “ni con el pétalo de una rosa”. No obstante, lo que se determine en este ejercicio no será vinculante ya que la Suprema Corte ha determinado que la justicia no puede consultarse.
Afirmó que, aunque la pregunta original fue modificada por los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, los ciudadanos saben que lo que se les consulta es definir si se investiga o no a los hombres que gobernaron México de 1988 a 2012.
Respecto a que varios de los delitos en los que pudieron haber incurrido los expresidentes ya habrían prescrito, el titular de ejecutivo federal consideró que es un avance porque si los ciudadanos votan por el sí, ello generaría un sentimiento de que por primera vez un “tribunal popular” enjuicio a los exmandatarios.
“Es un mensaje para la no repetición de los abusos, para que no impere, no prevalezca la impunidad. Creo que es importante este tema y que se siga revisando, analizando”, destacó.