El médico presidencial de Estados Unidos, Sean Conley, informó este martes que Donald Trump “no presenta síntomas” de Covid-19 en el quinto día después de haber contraído la enfermedad.
En un nuevo parte, Conley indicó que Trump “tuvo una buena primera noche de descanso en su casa” -volvió del hospital militar Walter Reed después de pasar allí tres días- y que “sus signos vitales permanecen estables, con un nivel de oxígeno ambulatorio de entre 95 y 97 por ciento”. “A nivel general continúa extremadamente bien”, agregó.
Trump pasó su primera noche en la Casa Blanca tras su internación en el centro médico militar, al que llegó el pasado viernes por la tarde. Al volver a la residencia presidencial -donde se espera que continúe su convalecencia- el mandatario envió un nuevo mensaje a través de su cuenta de Twitter en el que reiteró el que parece será su mensaje respecto de la enfermedad: “No dejen que los domine. No le tengan miedo”.
También halagó enfáticamente el tratamiento recibido, diciendo que “no se sintió muy bien” pero luego de que le administraran las distintas drogas -remdesivir, el cóctel de anticuerpos monoclonales de la empresa farmacéutica Regeneron y dexametasona- pasó a sentirse “genial, mejor que en 20 años”.
No obstante la actitud optimista del mandatario, el principal epidemiólogo de la administración estadounidense, Anthony Fauci, advirtió sobre la posibilidad de que tenga una recaída en los próximos días pese a su “buen aspecto”. “El problema es todavía lo suficientemente reciente”, explicó durante una entrevista para la cadena estadounidense CNN.
Y agregó: “No es ningún secreto que si miras el cuadro clínico de las personas que han contraído la enfermedad a veces, cuando sólo hay entre cinco y ocho días del inicio del contagio, puede haber una recaída”. Sin embargo, el profesional sanitario matizó su declaración indicando que ese eventual escenario es “poco probable”, e instó al cuerpo médico que lo trata a que esté “atento”.
En otro pasaje de la entrevista, Fauci señaló que la terapia experimental con anticuerpos de la compañía farmacéutica Regeneron podría haber jugado un rol fundamental a la hora de lograr la recuperación de Trump.
“Hemos tenido experiencia con otras enfermedades, (…) ha sido uno de los dos tipos de anticuerpos que tuvo mayor éxito con el ébola (…) lo que nos hizo ser cautelosamente optimistas (…), pues tiene el potencial de ser realmente algo muy, muy importante en el tratamiento de pacientes con Covid-19”, dijo. Trump está además recibiendo un tratamiento de cinco días de remdesivir y dexametasona, un esteroide que ya había obtenido buenos resultados en pacientes con Covid-19.
Trump, en paralelo, continuó este martes minimizando el impacto de la pandemia en el país. En distintos tuits enviados a lo largo del día, comparó a la enfermedad con la gripe y aseguró que si el país ha aprendido a convivir con esta última, debería hacer lo mismo con la primera.
Ante la llegada del invierno, que suele abarcar la mayoría de casos de influenza, expresó: “¿Vamos a cerrar el país? No, hemos aprendido a vivir con ella (la gripe), así como estamos aprendiendo a vivir con el Covid”, escribió en su cuenta de Twitter, un día después de salir del hospital en el que fue internado por tres días luego de dar positivo al nuevo coronavirus.
Posteriormente, la red social ocultó el mensaje por tener “información engañosa y potencialmente peligrosa”.
El presidente también sostuvo que a veces la cifra anual de muertos por gripe supera los 100.000, pese a que existe una vacuna contra la enfermedad. Sin embargo, la cantidad de muertes en Estados Unidos es menos de la mitad, promediando los 30 mil. A nivel global, la Organización Mundial de la Salud estima que entre 300 mil y 650 mil personas mueren cada año por esta enfermedad. Al 6 de octubre, casi 1,05 millones de personas han muerto como consecuencia del Covid-19.
Además. numerosos funcionarios y allegados a Trump han contraído la enfermedad. El listado incluye a la Secretaria de Prensa Kayleigh McEnany, el jefe de la campaña Trump 2020, Bill Stepien; a la asesora de Trump Kellyanne Conway; al ex gobernador de Nueva Jersey Chris Christie; a la titular del Comité Nacional Republicano, Ronna McDaniel; y a tres senadores republicanos (Mike Lee de Utah, Thom Tillis de Carolina del Norte y Ron Johnson de Wisconsin), así como el ayudante personal de Trump, Nick Luna.