Al igual que el petróleo, el litio será considerado propiedad de la nación y tendrá el mismo rango constitucional que hoy tiene el hidrocarburo, de acuerdo con la iniciativa para nacionalizar el mineral y modificar el artículo 27 de la Constitución, presentada al Senado por el poblano y morenista Alejandro Armenta.
En entrevista con MILENIO, expuso que con la modificación al artículo 27, el texto dirá: “Tratándose del petróleo y de los hidrocarburos sólidos, líquidos o gaseosos en el subsuelo y del litio, la propiedad de la Nación es inalienable e imprescriptible y no se otorgarán concesiones”.
Sobre las concesiones del litio que actualmente existen, Armenta refirió que “tal como sucedió con la nacionalización de la industria petrolera, tenemos que dialogar como dialogaron con los inversionistas del aeropuerto en Texcoco”.
“Quien tiene una concesión del litio puede extraer esta riqueza nacional como si fuera tierra de barranca, tierra de río y se están llevando riqueza nacional”, comentó, por ello al presentar la iniciativa en el Senado exhortó a sus compañeros de la cámara para que cambien las reglas.
La industria del litio en México está en el inicio, los principales esfuerzos de extracción son encabezados por empresas privadas, el más representativo por su inversión de 240 millones de dólares, es de la empresa canadiense Bacanora Lithium en asociación con la china Gangfeng, que explotan uno de los yacimientos más relevantes a escala global en Bacadéhuachi, Sonora.
El mercado para este mineral es muy amplio, pues se utiliza en baterías y pinturas para autos, aire acondicionado y otros, pero presentó un crecimiento exponencial con la llegada de los teléfonos celulares, pues las pilas de estos aparatos tienen como principal componente al litio, y se espera que con la llegada de los autos eléctricos se incremente aún más.
En México tener producción de litio hace sentido, pues cuenta con una de las industrias más importantes en ensamblaje de autos; sin embargo, actualmente no tiene extracción para consumo interno, pero sí es un relevante importador del mineral.
Cifras de la Secretaría de economía a 2016 (dato más reciente disponible), indican que se importaban 219 mil 418 kilogramos, siendo Chile el principal proveedor, con 216 mil kilogramos, seguido de Eslovenia, con 2 mil 200, y Estados Unidos con 218.
La iniciativa del senador Armenta tiene además el propósito es promover la creación de una empresa paraestatal denominada Litiomex, “sería la institución reguladora del uso y aprovechamiento de los yacimientos de litio, como ha sido con los petroleros y en ese proceso de constitución se tienen que regular y ajustar los contratos expedidos para que se adecuen a la regulación que le compete al Estado de un bien tan preciado”, expuso.
El litio se utiliza en la fabricación de pilas, acero, esmaltes y lubricantes, es considerado como el “oro blanco del futuro”.
“No podemos permitir que el litio que se va a convertir en el consumo energético más importante en los próximos 100 años quede en manos de extranjeros”. “Lo que no podemos permitir es que México siga siendo visto como un lugar de conquista, no podemos seguir permitiendo que sigan saqueando el país, sin que el país reciba los beneficios” afirmó.
Sobre el desarrollo de tecnología y capacitación de recursos humanos para la naciente industria del litio, el Senador expuso que será equivalente a lo que sucede en la industria petrolera.
“Rocío Nahle fue a India y Rusia, ella está apoyando a Pemex en el desarrollo de tecnologías limpias para las energías fósiles como es el caso de la refinería de Dos Bocas”. Por eso es necesario crear Litiomex, dijo, para que una empresa del Estado mexicano regule, establezca, oriente el proceso de desarrollo de explotación del litio como un insumo para el desarrollo de energías limpias.
“Van a llover los intereses económicos internacionales con ganas de querer invertir en México, pero no queremos que se lleven el litio, sino que desarrollen tecnología. Debemos de aprovechar el litio para que el desarrollo tecnológico se quede en el país”.
Refirió que México está iniciando en esta industria, pero hay que avanzar, por lo que lo primero es quitarle el apetito a las empresas saqueadoras de nuestro país. “El primer paso en nacionalizar el litio es rescatarlo de quienes nos ven como un país de conquista”.
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