El petróleo mexicano subió este martes a 7.12 dólares por barril, luego de que el lunes cerrara en -2.37 dólares, según datos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
En tanto, el WTI cerró en 11.57 dólares por barril, una baja de 43.37 por ciento.
El colapso del petróleo se extendió aún más a los contratos futuros para el próximo mes, con pérdidas que arrasan los mercados a medida que el mundo se queda sin lugares para almacenar crudo no deseado y lidia con los precios negativos.
El West Texas Intermediate cayó por debajo de cero el lunes por primera vez en la historia, a medida que los futuros de mayo se acercaban al vencimiento, dejando a los operadores en pánico mientras intentaban evitar la entrega de barriles físicos. Este martes, las pérdidas se extendieron al contrato del mes siguiente, lo que demuestra que un exceso de suministro masivo está impulsando la desbandada, en lugar de una peculiaridad técnica.
El colapso de los contratos posteriores subraya la gravedad de la crisis que sacude al petróleo en la era del coronavirus. El excedente masivo debido a la caída de la demanda de combustible está saturando los tanques de almacenamiento, los oleoductos y los buques cisterna rápidamente.
Muchos inversores minoristas, después de presenciar lo que sucedió con el contrato de mayo, intentan vender temiendo que lo mismo suceda en junio, explica Tariq Zahir, gerente de fondos de materias primas en Tyche Capital Advisors, con sede en Nueva York.
En el mercado de crudo Brent de referencia mundial en Londres, el contrato inmediato estaba en su mayor caída, respecto al siguiente con base en datos desde 2008. El contrato de junio del WTI en Estados Unidos fue detenido tres veces temprano en Nueva York para gestionar la volatilidad, dijo CME Group.
Los países que luchan contra la pandemia del virus han estado confinados durante semanas, reduciendo drásticamente los viajes por carretera y avión y deteniendo la mayor parte de la actividad económica. Muchos gobiernos están extendiendo medidas de confinamiento, devastando aún más la demanda.
Esto está obligando a las refinerías desde Asia a Europa y Estados Unidos a usar mucho menos crudo.
La velocidad y la escala de la caída han sido tan enormes que ha vuelto totalmente ineficaces los planes para recortes de producción sin precedentes por parte de la OPEP y sus aliados.
Arabia Saudita dijo que está listo para unirse a la OPEP+ en busca de más medidas para estabilizar el mercado petrolero. Rusia dijo que está monitoreando los precios de cerca, pero no se ha decidido sobre la convocatoria de Venezuela para una reunión del comité OPEP+.