TOKIO — Los relojes con la cuenta regresiva de los Juegos Olímpicos vuelven a hacer su tic-tac tras ser reajustados con las nuevas fechas.
El modelo instalado afuera de la Estación de Tokio y otras en la capital japonesa cambiaron casi de inmediato tras la confirmación de las nuevas fechas, del 23 de julio al 8 de agosto de 2021.
Los relojes mostraron 479 días este martes. Parece ser una fecha muy distante, pero pequeña e insignificante al compararse con las consecuencias del coronavirus en el planeta.
Igual no queda mucho tiempo para volver a montar la primera justa olímpica que se pospone desde el inicio de la era moderna de los Juegos, hace 124 juegos. Tampoco para los 11.000 deportistas olímpicos y los 4.400 de los Paraolímpicos, al igual que para los patrocinadores y encargados de la producción televisiva. Y todos esos fanáticos que habían adquirido boletos. Qué decir de los organizadores y los contribuyentes en Japón que han gastado miles de millones y que ahora tendrán que desembolsar más.
IOC, IPC, Tokyo 2020 Organising Committee and Tokyo Metropolitan Government announce new dates for the Olympic and Paralympic Games Tokyo 2020 https://t.co/QITtT5dcl8 pic.twitter.com/DHi4u74ZXa
— Olympics (@Olympics) March 30, 2020
“Creo que estos Juegos Olímpicos tendrá un enorme significado histórico”, dijo Yoshiro Mori, el presidente del comité organizador tras el anuncio de las nuevas fechas.
Mori, de 82 años y ex primer ministro de Japón, también recordó que no hay una garantía de que la pandemia del coronavirus esté bajo control dentro de un año. Ello incluye las nuevas fechas de los Paraolímpicos, que quedaron programados entre el 24 de agosto y el 5 de septiembre.
“Esta es una plegaria que hacemos y realmente creo que alguien escuchará nuestras plegarias”, dijo Mori.
Después de tantearse unos Juegos en la primavera, las nuevas fechas de verano son idénticas a las que se fijaron para 2020. Los organizadores esperan que los viejos planes puedan adaptarse al cambio, manteniendo las mismas sedes, no perder las habitaciones de la Villa Olímpica, movilizar los mismos voluntarios y permitir que la gente que compró boletos pueda mantenerlos.
Las nuevas fechas también esquivan entrar en conflicto con el apretado calendario deportivo en Norteamérica y Europa. Pero el verano en Tokio implica calor y humedad agobiantes, lo que era la mayor preocupación de los organizadores antes de la pandemia.
Muto dijo que los organizadores no han recibido notificación de alguna de sus arenas o predios, advirtiéndoles que no podrán montar una competencia en sus instalaciones el año próximo.
“Son varias sedes que aún no pueden tomar una decisión. Se tendrá que negociar con ellos”, dijo Muto. “Si tenemos que hacer un cambio de sede, entonces habrá que ajustar el calendario de competencia también”.