Juegan un papel fundamental en el día a día del presidente Andrés Manuel López Obrador. Son las encargadas de cuidarle la espalda y garantizar su seguridad entre las multitudes. Conforman su primer escudo protector. Son las mujeres de la ayudantía.
No son elementos de Seguridad Pública, del Ejército o de la Marina; no fueron a Israel a recibir una capacitación como las ex gacelas de la Jefatura de Gobierno; y algunas de ellas, recién estrenadas en el nuevo oficio, terminan lesionadas luego de cada tumulto, porque no tienen experiencia en seguridad, pero es a lo que se dedican y lo hacen sin importar los golpes y el sudor que implique.
Estefany, Jimena, Liliana, Nayely, Jessica, Regina, Andrea y Paola son las mujeres de confianza del Presidente. En remuneración salarial están en un buen nivel, ganan hasta cinco veces más que cualquier elemento policial del país. Y reciben lo mismo que sus compañeros de ayudantía.
Son la primera cara. El filtro inicial por el simple hecho de ser mujeres. Mientras sus ocho compañeros hombres abren paso en cualquier acto, calle, valla o aeropuerto, ellas deben resguardar al Presidente para que nadie lo lastime.
Estas ocho mujeres, todas profesionistas, crean una especie de burbuja para que el mandatario pueda avanzar apenas estirando los brazos para recibir peticiones. Son el primer círculo de seguridad porque se cree que por ser mujeres los simpatizantes contendrán sus impulsos y empujarán menos. Pero eso nunca pasa. Nadie se detiene. Son de la máxima confianza de López Obrador.
No solo porque son quienes lo acompañan hasta las zonas más alejadas del país, sino porque algunas de ellas llegaron hasta aquí por ser seguidoras de su carrera política desde que eran unas niñas.
Vienen de estados como Veracruz, donde el tabasqueño siempre ha tenido muchos seguidores. Las ocho aparecen en la página oficial de Nómina Transparente con un sueldo bruto de 45 mil 075.00 pesos y uno neto de 31 mil 327.12 y aunque ese no es su puesto, están registradas como subdirectoras de área de la Oficina de la Presidencia de la República, al igual que sus ocho compañeros: los dos Diego, Octavio, Alejandro, José Antonio, Abaide, Hernando y Javier.
Todos, coordinados por Daniel Asaf, quien en la misma página de transparencia aparece con puesto de “eventual” en la Oficina de la Presidencia de la República, con un sueldo bruto de 154 mil 472.00 pesos y uno neto de 107 mil 3586.04 pesos.
Cada una es distinta, pero todas comparten una similitud: su fiel servicio e histórico seguimiento a la lucha de López Obrador.
Muchos de ellos en sus redes sociales, también dicen pertenecer a Morena. Algunas se caracterizan por su sensibilidad y amabilidad con los simpatizantes del Presidente, se esfuerzan por hacerlos sentir atendidos y garantizarles de la manera más convincente posible, que sus peticiones sí tendrán seguimiento. Una que otra, en cambio, se caracteriza por ser más duras.
No importan las riñas que se ganen en cada gira, cuidan la espalda del Presidente a toda costa.
En sus inicios, la ayudantía estaba conformada por 10 hombres y 10 mujeres, pero algunos de ellos fueron abandonando el puesto por motivos personales. Otros más se han sumado en las últimas semanas.
Hasta ahora solo tres hombres lograron ascender de puesto gracias a nombramientos directos de López Obrador, como Ángel Carrizales, quien finalmente fue designado director de la Agencia de Seguridad Energía y Ambiente.
Una prueba más de que en el gobierno de la cuarta transformación, la perseverancia y lealtad, rinden frutos. Pero las mujeres, siguen esperando su turno.