Senadores de Morena y del PRD se pronunciaron en contra de aplicar la pena de muerte a quienes comentan crímenes como feminicidios o de odio contra mujeres, niñas, niños y adolescentes.
Entrevistados por separado, los legisladores señalaron que con penas esas no se dará solución a esa problemática, sino que se tiene que promover un cambio de cultura desde la niñez para que se fomente el respeto de género y a la diversidad.
El presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal Ávila, afirmó que es enemigo de las leyes draconianas, además de que la pena de muerte es una barbaridad, está prohibida en la Constitución y es preferible que el país se mantenga sin ella.
Hay quienes lo están promoviendo, es un asunto de ellos, pero yo en lo personal me parece una barbaridad. No conocen la historia, no puede uno, por la circunstancia y la crisis en la que ha vivido el país en los últimos años, establecer ese tipo de penas bárbaras, como la pena de muerte”, afirmó.
El también coordinador de los senadores de Morena se pronunció en contra de la pena de muerte y exhortó a que se confíe en las instituciones, porque se hace un gran esfuerzo para revertir esta situación, y tampoco es con justicia de propia mano como se va a resolver, “con la ley del talión, ojo por ojo, diente por diente, no, eso no.
Vivimos en una sociedad organizada, con valores y con principios, con defectos y con virtudes y creo que después de tanto abandono el país tiene que empezar un proceso nuevo de reconstrucción del tejido social y de regeneración de la convivencia social”, resaltó.
También la senadora de Morena y presidenta de la Comisión para la Igualdad de Género, Martha Lucía Micher Camarena, destacó que a nivel personal rechaza la pena de muerte, y respeta la libertad del senador Víctor Fuentes, del PAN, en expresar su punto de vista de proponer se haga una consulta nacional sobre si los feminicidas deben ser castigados con la pena de muerte.
“Personalmente no estoy a favor, ni de que se meta a la cárcel a 80 años a la gente”. Apuntó que lo que se tiene que hacer es educar a los hombres y a los niños de manera distinta, trabajar con niños y niñas en los libros de texto, en los medios de comunicación, en el Internet, en las emprestas públicas y privadas.
El coordinador de los senadores del PRD, Miguel Ángel Mancera, indicó que no está de acuerdo con la pena de muerte.
Estoy convencido de que para atender el feminicidio es mucho más importante un mecanismo de atención, de respuesta, de auxilio efectivo a buscar una consecuencia que ha demostrado que no inhibe la comisión delictiva. Está abrogada de nuestra Constitución y debe de continuar, desde mi punto de vista, abrogada del sistema jurídico mexicano”, concluyó.
Senador propone debatir pena de muerte para homicidas de infantes
El senador Víctor Fuentes Solís, del Partido Acción Nacional (PAN), propuso que se abra un debate sobre imponer la pena de muerte para castigar a homicidas de niñas, niños, adolescentes y mujeres.
Informó que realizó en su natal Nuevo León una encuesta por redes sociales, Facebook e Instagram, y más de 90 por ciento de los participantes se pronunció por castigar el feminicidio y crímenes de ese tipo, como el asesinato de Fátima, de siete años de edad, e Ingrid Escamilla, para que no queden impunes.
El senador apuntó que en este debate nacional deberían participar expertos de países donde la pena de muerte se aplica, como Estados Unidos y Japón.
Tenemos que aceptar que estamos es una situación muy grave de impunidad; según datos del Inegi hay una gran cantidad de delitos que no son denunciados, más del 90 por ciento no se denuncian por una falta de confianza en las autoridades”, expresó.
Consideró necesario hablar abiertamente del tema, que se exponga qué sucede cuando se aplican este tipo de panas; además opinó que se debe tener la capacidad de escuchar al pueblo “ante un país impune”.
Sugirió una consulta a la población sobre ese tema, lo cual podría ser a través de centros de votación y con el apoyo de órganos electorales, además de fedatarios públicos.
Debemos darle más sentido a la voluntad de la gente. Conocer si la gente está dispuesta, ya que un senador que no representa a su electorado debe renunciar”, concluyó.