Pasaron solo 48 horas después de que el Senado de Estados Unidos votó por exonerar al presidente Donald Trump en el juicio político, para que el mandatario tomará las primeras acciones en contra de quienes testificaron en su contra.
El despido de Gordon Sondland, que servía como embajador de Estados Unidos ante la Unión Europea, fue de las primeras decisiones que Trump tomó en contra de los testigos a los que los demócratas llamaron a declarar durante la investigación previa al juicio.
Sondland informó a través de un comunicado que había sido retirado de su cargo de forma inmediata. “Estoy agradecido al presidente Trump por haberme brindado la oportunidad de servir, al secretario Pompeo por su constante apoyo y a los profesionales excepcionales y dedicados de la Misión de los Estados Unidos ante la Unión Europea”, dijo a través de un comunicado.
Ese mismo día, el presidente estadounidense también destituyó al teniente coronel Alex Vindman, el principal experto de Ucrania en el Consejo de Seguridad Nacional.
“Al teniente coronel Vindman se le ha pedido que se marchara por decir la verdad. Su honor, su compromiso con lo correcto, asustó a los poderosos”, dijo David Pressman, abogado del coronel Vindman, en un comunicado citado por The New York Times.
Tanto Vindman como Sondland fueron testigos clave en las audiencias. El ahora exembajador estadounidense señaló en una de sus declaraciones que sí hubo quid pro quo, lo que significa que sí se presiono al gobierno de Ucrania para que abriera la investigación contra Hunter Biden, hijo del ex vicepresidente Joe Biden, a cambio de fortalecer las relaciones entre entre Washington y Kiev.
Por otro lado, el testimonio de Vidman, que prestó primero en privado y luego en público ante los dos comités de la Cámara de Representantes, fue uno de los pocos en los que los demócratas consiguieron información de primera mano, pues el coronel fue una de las personas que escuchó la conversación que sostuvo Trump con su homólogo Volodímir Zelenski el 25 de julio de 2019.
NYT también precisó que Yevgeny Vindman, hermano gemelo del testigo y también teniente coronel destinado en la Casa Blanca, ha sido obligado a abandonar su puesto de trabajo a la vez que su hermano.
Se espera que Vindman regrese al Pentágono, aunque aún no está claro cuál será su asignación. En tanto, el viernes el secretario de Defensa, Mark Esper, dijo que en el Ejército le “damos la bienvenida a todos los miembros de nuestro servicio, donde sea que presten servicio, a cualquier tarea que se les asigne”.
De acuerdo con The Washington Post, la Casa Blanca está estudiando el traslado de otros oficiales que desoyeron la controvertida orden del presidente.