Empleados sindicalizados de la delegación en Sonora del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), así como miembros de etnias, exigen el cese inmediato de la actual encargada de la oficina de representación, Judith Terrazas Espinoza, por hostigamiento laboral, amenazas y falta de resultados.
Luis Jesús Palma Murillo, líder sindical en la entidad de los trabajadores del INPI, señaló que en múltiples ocasiones han buscado dialogar con Terrazas Espinoza, pero no han obtenido respuestas positivas.
Explicó que esta situación tiene alrededor de cuatro años desde que llegó Terrazas, en un principio como administradora, pero al llegar la actual administración Federal y desaparecer la figura del delegado, ella quedó como responsable, en espera de un representante en Sonora del INPI, pero esta situación se ha retrasado.
“Desde que empezó el trato empezó a sentirse un poco recio hacia nosotros y conforme fue apropiándose del cargo, el trato subió de tono, nosotros somos un sindicato que es un contrato colectivo de trabajo, se toman acuerdos a nivel nacional, se pública en el Diario Oficial de la Federación y se debe de respetar”, apuntó.
Por su parte, Patricia Medina Álvarez, representante y gestora de los ocho pueblos indígenas de la etnia Mayo, denunció que los representantes estatales del INPI deben gestionar recursos y programas para el desarrollo indígena, pero hasta el momento con Terrazas Espinoza no se ha dado.
Enfatizó que los representantes por reglamentación deben ser 100% indígenas, hablar el dialecto de su etnia, además de contar con una carrera universitaria, requisitos con los que no cumple la actual encargada, además de que no los atiende.
“Es una lástima que el INPI se haya creado para ellos (indígenas) y no esté dando el trato aquí en Sonora no están acatando, ni atendiendo a los indígenas, con dignidad, se está discriminando y no hay puertas abiertas”, sentenció.
El Sol de Hermosillo buscó la postura de la representante del IMPI, sin que hasta el momento se haya obtenido respuesta.