Kansas City Chiefs y San Francisco 49ers se verán las caras en la Super Bowl LIV del próximo 2 de febrero. Ambos equipos buscarán en Miami proclamarse campeones de la NFL en una final inédita. En la AFC, los Chiefs se deshicieron de los Tennessee Titans, la revelación de estos playoffs (35-24) y los 49ers hicieron lo propio con los Green Bay Packers (37-20) en la final de la NFC.

Los Chiefs vuelven a la Super Bowl 50 años después de su última aparición (1970) en la que consiguieron su único anillo. Al igual que sucediera ante los Texans en la ronda divisional, Kansas City se obligó a una remontada. Los Titans saltaron al Arrowhead Stadium sin complejos, dispuestos a completar otra proeza tras dejar en el camino al mejor equipo de la regular season, los Baltimore Ravens y a los vigentes campeones, los Patriots de Tom Brady. Un touchdown de su gran estrella, Derrick Henry (19 carreras, 69 yardas) colocaba el 0-10 en el marcador en un magnífico primer cuarto de los hombres de Mike Vrabel.

Ryan Tannehill imponía su ley alargando los drives, desgastando a la defensa de los Chiefs y evitando que Mahomes y su ofensiva entraran en juego. Pero en el segundo cuarto todo cambió. El MVP de 2018 se echó al equipo a sus espaldas y le dio dos marchas más al encuentro. El cambio de ritmo en el juego descolocó a unos Titans que no cuentan con las armas para frenar el vendaval ofensivo de Patrick Mahomes y los suyos. El quarterback conectó con Tyreek Hill en dos ocasiones (7-10 y 14-17) antes de protagonizar la jugada del partido. En menos de dos minutos Mahomes finiquitó el drive con un touchdown de carrera (27 yardas), sorteando a rivales y dando la primera ventaja a su equipo justo antes del descanso (21-17).

Los Titans no supieron reaccionar y Mahomes siguió jugando a placer y dibujando una exhibición tan solo al alcance de los elegidos. Los Chiefs sellaron el triunfo (35-24) y volverán a la Super Bowl por la puerta grande.

Su rival también llega pletórico a la cita. Los 49ers arrasaron a Green Bay en una final de la NFC que dominaron de principio a fin. Los Packers no aprendieron la lección del severo correctivo que recibieron el pasado mes de noviembre en el encuentro de regular season (37-8) y volvieron a caer con estrépito en el Levi’s Stadium. El juego de carrera y la defensa de San Francisco ahogó a Aaron Rodgers y sus Packers, que se mostraron impotentes en todo momento.

Raheem Mostert resultó imparable con cuatro touchdowns (220 yardas en 29 carreras) y lideró a unos 49ers que completaron un partido perfecto. Los locales castigaban una y otra vez los errores individuales de su rival y ya en el descanso la ventaja parecía insalvable (27-0). La defensiva, capitaneada por el rookie Nick Bosa incomodó a un Rodgers que fue interceptado en dos ocasiones y que no pudo encontrar a sus receptores hasta el primer drive de la segunda mitad (27-7). Un espejismo para unos Packers que vieron como en el siguiente ataque Mostert firmaba la sentencia con su cuarto touchdown (34-7).

El último periodo fue un trámite en el que Jimmy Garoppolo se dedicó a consumir el reloj para administrar así su ventaja mientras los Packers maquillaban el marcador hasta el 37-20 final.

En Miami los 49ers buscarán su sexto trofeo Vince Lombardi, igualando así a los Patriots y a las Steelers como equipos más laureados de la historia.