La Fiscalía General de Coahuila dio a conocer este lunes que las armas utilizadas en el tiroteo del Colegio Cervantes de Torreón, ocurrido la mañana del viernes, pertenecen al abuelo del menor que disparó en nueve ocasiones contra una maestra y sus compañeros para luego quitarse la vida.
“Pertenecen a la familia, al abuelo. Estamos esperando concluir la primera etapa y entonces veremos cuáles son las acciones legales y en contra de quién habrán de ejercerse”, detalló Gerardo Márquez Guevara, fiscal General del estado.
Debido a que las investigaciones continúan, la responsabilidad de los tutores del menor, los abuelos, aún no puede ser determinada por la autoridad ministerial.
“El Código prevé una serie de conductas que pueden ser constitutivas de delitos, pero tiene que ajustarse los hechos exactamente a lo que prevé la ley”, agregó Márquez.
Este fin de semana, autoridades ministeriales de Coahuila realizaron un cateo en la casa del menor. Además de armas, fueron localizados dispositivos móviles para determinar si el menor actuó solo o influenciado por alguna persona.
La información obtenida de este careo se cruza con 25 declaraciones tomadas de entrevistas realizadas a familiares y amigos cercanos del niño.
Autoridades federales y estatales que conforman el Consejo Estatal de Seguridad y Protección Civil sesionaron este lunes, pues el tiroteo del colegio originó un llamado del Gobierno estatal a la coordinación.
“La seguridad no tiene tiempos, es ahorita; el cronograma que nos exige la sociedad es un trabajo permanente. ¿Cómo hacemos que esto baje a los 38 municipios y que se traslade también a los padres de familia? Y cómo nuestras acciones van también encaminadas a mejorar los entornos familiares”, puntualizó el fiscal.