Cientos de personas gritaron durante horas a una veintena de luchadores de la Lucha Libre AAA que desfilaron en el ring de la Arena Coliseo en Monterrey el 20 de octubre del 2019. El grito a los rudos, el lamento de la porra hacia los técnicos… Parecía que los asistentes al 64 aniversario del recinto ya no podrían expedir tanta energía. Hasta que el cuarteto más esperado de la noche apareció ante sus ojos: Rush, L.A. Park, Murder Clown y La Parka.
El vitoreo del público enardeció. Por fin podrían presenciar las caídas estelares y por los que el evento fue lleno total. Ante ellos, primero se presentó William Arturo Muñoz, conocido en el mundo luchístico como ‘Rush’, un deportista que a sus 30 años ha ganado ocho luchas de apuestas.
Su objetivo sobre el ring era quitarle la máscara a Jesús Alfonso Escoboza Huerta, La Parka, uno de los personajes más emblemáticos de la industria con más de 22 años de carrera, y quien falleció el 11 de enero de este 2020.
Y así lo intentó desde el primer momento en que ambos aparecieron en el cuadrilátero. El público parecía partirse a la mitad. Algunos gritaban al “Técnico Más Odiado”, como se le ha llamado a Rush, mientras que otros lo insultaban y apoyaban a su contrincante. Pronto, a su encuentro se sumó el segundo dúo: L.A. Park y Murder, quienes aumentaron la emoción de los espectadores.
El rol de poder en la lucha cambiaba: había momentos en los que parecía que la máscara de La Parka le sería arrancada, pero en otros más, él tenía el dominio del llaveo que parecía que lo llevaría a la victoria.
Los ojos de los asistentes no sabían a donde mirar: había luchadores arriba y abajo del ring, saltos desde las cuerdas, golpes con objetos que encontraban a su camino, empujones que rompían las barreras entre el cuadrilátero y el público… Hasta que llegaron los últimos minutos en los que Alfonso Escoboza aparecería frente a los fanáticos, sin que nadie lo supiera.
Los protagonistas de la noche se encontraban dando golpes abajo del ring. Los únicos que permanecían arriba, a los ojos de toda la Arena Coliseo Monterrey, eran L.A. Park y La Parka. Los asistentes estaban expectantes a saber cuál sería el siguiente movimiento de los luchadores para vencer a su rival.
Escoboza, a pesar de ser técnico, ya había golpeado con sillas a los antagonistas de la noche, por lo que las expectativas eran altas. Después de, aparentemente, analizarlo unos minutos, lo decidió: miró a Rush, quien estaba de pie abajo de la parte izquierda del cuadrilátero; así que La Parka retrocedió, se recargó en las cuerdas para tomar impulso y corrió.
Su maniobra era saltar entre las cuerdas y caer sobre su contrincante, pero su pie se atoró en una de ellas por lo que no alcanzó la altura necesaria. Rush no lo pudo atrapar, y el descenlace casi fatal fue la cabeza del luchador estrellándose contra una barrera de contención.
El golpe fue evidente: el público gritó y por unos segundos guardó silencio preocupado por lo que habían visto. Mientras que William Arturo Muñoz se le tiró encima para hablar con él de la manera más discreta posible. A pesar de que la inquietud se le notaba en el rostro, no podía salirse del papel de adversario.
La Parka no se movió. Se quedó en el mismo lugar en el que cayó, por lo que el personal de la Arena Coliseo comenzó a movilizarse. Hicieron señales para que el espectáculo continuara sin el luchador, mientras ellos lo asistían y llevaban en una camilla a urgencias. El final del encuentro tuvo poca importancia cuando a través de redes sociales se difundieron las imágenes del accidente.
Alfonso Escoboza no se volvió a subir al ring. Aunque sus fanáticos notaron su ausencia de los carteles de la luchas con la AAA, todos creían que no tardaría su regreso. Pero nunca pudo recuperarse de las lesiones de esa noche.
El sábado 11 de enero por la noche, La Parka falleció en Hermosillo, Sonora. En las redes sociales de la compañía luchística se anunció que la causa de su muerte fue una falla renal y pulmonar “Jesús Alfonso Escoboza Huerta recorrió México y el mundo bajo la máscara de La Parka con la Carabana Estelar AAA por más de 20 años, alcanzando el nivel de ídolo de las multitudes y leyenda de la lucha libre a nivel mundial”, comunicaron.