Venecia, Italia, se encuentra en alerta ante una nueva “acqua alta” (marea alta) excepcional el domingo, que según el pronóstico podría alcanzar un pico de 160 centímetros sobre el nivel del mar y mantenerse unas 12 horas, solo 27 centímetros menos que la récord del pasado martes.
En un boletín, el centro de mareas de la Municipalidad de Venecia lanzó este sábado la alerta y aunque la ciudad de los canales recobra la calma poco a poco tras la acqua alta del martes que causó una inundación de 187 centímetros por varias horas, instó a tomar las precauciones necesarias.
Señaló que el fenómeno debería disminuir a partir del lunes, sin embargo, el agua no ha bajado tanto desde mitad de semana, ya que tan solo alcanzó un nuevo pico de 115 centímetros durante la medianoche, en un hecho clasificado como muy sostenido (código naranja) y no excepcional, como el del martes y el miércoles.
Los servicios de protección civil mantienen a su vez la “alerta roja” meteorológica y advirtieron el riesgo de fuertes vientos durante el sábado, de acuerdo con reportes de la prensa local.
El alcalde veneciano, Luigi Brugnaro, cerró el viernes la emblemática plaza San Marcos durante varias horas luego que el nivel del agua alcanzó los 154 centímetros.
El estado de emergencia fue declarado el jueves
Venecia, que con más de 100 islas dentro de una laguna frente a la costa noreste de Italia es uno de los destinos turísticos más visitados del mundo, sufrió el martes pasado su peor inundación en 53 años; el agua invadió las calles, iglesias, museos, hoteles, restaurantes, comercios, escuelas y casas, y se mantiene en un 70 por ciento de la ciudad.
Los autobuses acuáticos, conocidos como vaporetti, no funcionan y los comercios apenas empiezan a recuperarse, de acuerdo con Brugnaro, quien atribuyó el fenómeno al cambio climático.
El estado de emergencia fue declarado el jueves en la ciudad, la cual podría perder su reconocimiento como patrimonio mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) tras la catástrofe, cuyos daños ascienden a mil millones de euros, según las autoridades.
Al igual que el alcalde de Venecia, el ministro italiano de Medio Ambiente, Sergio Costa, señaló que las inundaciones excepcionales son resultado directo del cambio climático, ante el cual se necesitan acciones conjuntas.
Al respecto, la protesta de activistas del movimiento ambientalista Friday For Future tuvo lugar en medio del caos en el Puente de Rialto.
Desde Venecia hasta Matera, suficientes caminos electorales, unidos contra el cambio climático, es hora de actuar”, sentenciaron los participantes en un mensaje.
Según organizadores citados por la prensa, el mensaje es dirigido a los políticos que se han hecho presentes en Venecia. “Venecia se ahoga“, añadieron.