Ciudad de México 7 de noviembre de 2019. Con la intención de regular la comercialización y el uso de los sistemas electrónicos de administración de nicotina, conocido también como “cigarro electrónico”, la diputada federal Lorenia Valles Sampedro ingresó a la Cámara de Diputados una iniciativa de ley que beneficiará a cerca de un millón de usuarios y restringirá su acceso a personas mayores de 18 años.

“En la actualidad, en el artículo 16 fracción VI de la Ley General para el Control del Tabaco se prohíbe “comerciar, vender, distribuir, exhibir, promocionar o producir cualquier objeto que no sea un producto del tabaco, que contenga alguno de los elementos de la marca o cualquier tipo de diseño o señal auditiva que lo identifique con productos del tabaco”, impedimento que incluye a los SEAN y los SSSN”, manifestó la legisladora.

Este precepto ha llevado a la Comisión Federal para la Protección de Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) a implementar alertas sanitarias y prohibir el ingreso de ese tipo de artefactos. Sin embargo, la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha declarado que esa fracción es inconstitucional, porque atenta contra el derecho al libre comercio y el derecho al libre desarrollo de la personalidad.

La iniciativa promovida por Lorenia Valles busca que dicha fracción de la Ley General para el Control del Tabaco, establezca una restricción que deje de prohibir los SEAN y lo SSSN, regulando su comercio y uso a través de un etiquetado que alerte a los consumidores sobre los riesgos a la salud, además de prohibir el uso de estos artefactos en espacios libres de humo de tabaco y vapor.

“La Ley General para el Control del Tabaco, aprobada en el 2008 con el objetivo de proteger a las personas de los efectos nocivos del consumo del tabaco y de las emisiones de éste, tiene su origen en el Convenio Marco para el Control del Tabaco (CMCT) de la Organización Mundial de la Salud (OMS), tratado internacional que en México entró en vigor en el 2005”, dijo.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (ENCODAT) 2016- 2017, citada por la legisladora para fundamentar su iniciativa, actualmente 14.9 millones de mexicanos son fumadores, de los cuales el 73.6% está interesado en dejar de fumar y 9.9 millones han intentado dejarlo en por lo menos una ocasión. Asimismo, existen 975 mil usuarios de vaporizadores.

Valles Sampedro agregó que la misma encuesta reporta que el tabaco es responsable del 8.4% de las muertes en el país; siendo 43,000 personas las que cada año mueren por enfermedades relacionadas con su consumo. Mientras que el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas de la Cámara de Diputados, en el reporte El Tabaquismo y su efecto en las Finanzas Públicas: 2007-2017.

“Es un tema preocupante, pues en el 2017 el tabaquismo costó 81 mil 132 millones de pesos, equivalente al 2.8% de los ingresos tributarios”, argumentó la Diputada sonorense.

Según el texto presentado, en México y otros países ha habido diversos esfuerzos dirigidos a regular el comercio y el uso del cigarro electrónico y los vaporizadores.

“Reino Unido y Nueva Zelanda ya reconocen el uso de los vaporizadores como una alternativa para dejar de fumar. En el país, los estados de Aguascalientes, Baja California, Chiapas, Ciudad de México, Coahuila y Guanajuato han promovido iniciativas para incorporar al cigarro electrónico dentro de la prohibición de productos a usar en espacios 100% libres de humo; este año se hizo ley en Aguascalientes y Chiapas”, afirmó.

Para la diputada Lorenia Valles, la intención de regular en una ley general el comercio y uso de estos artefactos, es un tema de salud pública. Por un lado, la ausencia de normas sanitarias y de calidad ha propiciado que se exhiban al público productos cuyos aditamentos y sustancias son desconocidos y que pudieran ser dañinos o no apto para niñas, niños y adolescentes; además de que están al alcance de todos, por su venta en centros comerciales, tiendas especializadas, plataformas digitales y hasta establecimientos irregulares, que da lugar a la proliferación de la clandestinidad.

Al proponer la legalización de los SEAN y los SSSN, internacionalmente reconocidos como productos alternativos para inhibir la adicción al tabaco, también pretende contribuir a la reducción del consumo de los cigarros de combustión al ampliar la oferta del mercado.

“Es muy claro, incorporar normas sanitarias y de calidad posibilitará contar con productos de mayor calidad y más aptos para la salud de consumidores y no consumidores”, señaló.

Finalmente, la diputada por el Distrito 3 de Sonora asegura que el cambio propuesto beneficiará la recaudación de impuestos de la hacienda pública, con lo que habrá más recursos para el financiamiento de programas sociales y otras prioridades del país.