El “catastrófico” huracán Dorian se ha fortalecido en las últimas horas hasta alcanzar la categoría 5, la máxima en la escala Saffir Simpson, y se espera que hoy toque tierra al noreste de Bahamas, donde llegará con vientos de 260 kilómetros por hora.
Los efectos del potente ciclón ya se están sintiendo en poblaciones pesqueras de la isla Gran Bahama, a unos 240 kilómetros de la costa atlántica de Florida, donde marejadas, vientos y lluvias empiezan a dejar las primeras inundaciones.

El primer ministro de Bahamas, Hubert Minnis, advirtió que Dorian era una “tormenta devastadora y peligrosa” y dijo que cualquiera “que no evacúe se pone en extremo peligro y puede esperar una consecuencia catastrófica”.
El huracán, que avanza despacio, ya generó las primeras inundaciones que van acompañandas de lluvias y vientos devastadores, además de una crecida peligrosa en el nivel del mar llamada marejada ciclónica.

Las precipitaciones han alcanzado 76 centímetros en zonas aisladas del noroeste de Bahamas, podrían llegar de 38 en las Carolinas y 15 en las islas centrales de Bahamas y la costa atlántica de Florida y Georgia.
El ojo del huracán, cuyos vientos se sienten hasta 45 kilómetros desde su centro, se prevé que se acerque a la costa este de Florida desde el lunes hasta el martes por la noche.

De acuerdo con las autoridades, el archipiélago de las Bahamas, propenso a enfrentar tormentas, recibe el golpe directo de un huracán cada cuatro años, en promedio.
El Centro Nacional de Huracanes explicó que el riesgo de fuertes vientos y niveles elevados de agua aumentarán a lo largo de la costa de Georgia y las Carolinas para mediados de la semana.