La familia del exjefe de seguridad en la Ciudad de México, Arturo ‘El Negro’ Durazo, no podrá reclamar más la “sucesión testamentaria” de la casa conocida como “El Partenón”, ubicada en Zihuatanejo, Guerrero.
Así lo resolvió la segunda sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), luego de desechar una demanda de amparo promovida por Francisco Arturo Durazo Garza, hijo del exmando policiaco.
Con ello, Durazo Garza y la madre de éste, Silvia Garza Sáenz, perdieron la última oportunidad legal para recuperar la propiedad incautada en 1984 y actualmente en el abandono.
Durante su cargo al frente de la policía capitalina, Durazo mandó a construir la mansión frente al mar, con un diseño arquitectónico similar al Partenón griego. En su interior, el inmueble tiene una discoteca como la Studio 54 de Nueva York.
Adornada con esculturas de inspiración griega, la residencia fue incautada en 1984 por el gobierno de Miguel de la Madrid Hurtado, en el proceso conocido como “renovación moral”, y cinco años más tarde fue reclamada por el gobierno de Guerrero. En 1989 consiguió la expropiación de la residencia en Zihuatanejo, que dio inicio a un pleito legal con la familia de ‘El Negro’ Durazo.