El acuerdo con el FMI le abrió las puertas al gobierno ecuatoriano para recibir unos 6,000 mdd adicionales provenientes de otros organismos multilaterales.
El directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) informó el lunes que aprobó el acuerdo alcanzado con Ecuador en febrero por un crédito de 4,200 millones de dólares (mdd), lo que permitirá acceder a un desembolso inmediato de 652 mdd.
El acuerdo con el FMI le abrió las puertas al gobierno ecuatoriano para recibir unos 6,000 mdd adicionales provenientes de otros organismos multilaterales, en momentos en que el país andino enfrenta problemas de liquidez por un abultado déficit fiscal y un fuerte endeudamiento externo.
“Las autoridades ecuatorianas están implementando un amplio programa de reformas con el objetivo de modernizar la economía y allanar el camino para un crecimiento sólido, sostenido y equitativo”, sostuvo el FMI en un comunicado.
El acuerdo aprobado se denomina Servicio Ampliado del FMI (SAF), que implica un apoyo a las políticas del Gobierno ecuatoriano en los próximos tres años.
La directora gerente del FMI, Christine Lagarde, explicó que el programa busca reducir la relación deuda-PIB de Ecuador a través de una “combinación de un reequilibrio de la masa salarial, una optimización cuidadosa y gradual de los subsidios a los combustibles, una re-priorización del gasto de capital y bienes y servicios, y una reforma fiscal”.
Además, buscará un fortalecimiento de la política fiscal en el mediano plazo con “controles fiscales más rigurosos y una mejor gestión financiera pública”.
El ministro de Economía, Richard Martínez, dijo que las condiciones financieras del empréstito son “inmejorables comparadas con las de la década pasada” al obtener una tasa de un 3 por ciento y un repago a 10 años, con 4 años de gracia.
Ecuador ha dicho que continuará con su plan de reducción del Estado con el despido de funcionarios públicos. También buscará fortalecer sus reservas internacionales y a su banco central, y aplicará cambios tributarios para aumentar la recaudación.
El escepticismo frente el FMI es fuerte en Ecuador, así como en varios países de América Latina, por los efectos de sus políticas en las economías locales. Los gremios de trabajadores han amenazado con protestas frente al acuerdo.
El acuerdo incluye además un componente de inversión social, que permitirá una mayor cobertura a las asistencias económicas que entrega el Gobierno a sectores vulnerables y un combate a la corrupción, según el organismo internacional. Ecuador no llegaba a un entendimiento con el FMI desde 2003.