Hermosillo, Sonora, febrero 25 de 2019.- Que al menos el 20% de lo que recauda la Dirección de alcoholes, se destine a fortalecer la educación de los sonorenses a través del Instituto de Becas y Crédito Educativo, IByCE, propuso Luis Armando Alcalá Alcaraz.

En la iniciativa que presentó el diputado priista en la sesión del pleno de la LXII Legislatura, se especifica que no se trata de crear nuevos impuestos, sino destinar una parte de lo que se recauda, al IByCE.

El Instituto de Becas y Crédito Educativo del Estado de Sonora, detalló el diputado priista, participará de los ingresos que se recauden a través de la Dirección de Alcoholes de la Secretaría de Hacienda, por pago de derechos como: expedición, revalidación y canje de licencias; expedición de permisos para porteadores y las guías; autorizaciones eventuales; reposición de licencias y permisos y cambio de domicilio.

Armando Alcalá argumentó que la educación es la mejor herramienta para generar el desarrollo de las inteligencias individuales y debe ser conducto para elevar de las condiciones de vida de las familias.

“No podemos negar que la cobertura y la eficiencia de los programas de becas han aumentado desde sus inicios. No obstante, estos canalizan proporciones reducidas de los recursos, que resultan insuficientes para atender las necesidades y limitan las posibilidades de impacto en la cantidad que se requiere”, mencionó.

Se refirió a diversos impuestos que se aplican en diferentes partes del mundo con el afán de reducir su consumo y, a la vez, traducirlos en beneficio para los ciudadanos como lo que sucede con las bebidas azucaradas, impuesto al tabaco y a los juegos de apuestas.

De aprobarse esta iniciativa que se turnó a la Comisión Segunda de Hacienda y a la de Educación y Cultura para su análisis, subrayó, los recursos económicos establecidos serán adicionales a las ya aprobados para el IByCE en el presupuesto para el ejercicio fiscal 2019, con el fin de que ese instituto pueda ampliar la cobertura de apoyos en becas y créditos a estudiantes.

“El consumo excesivo de bebidas alcohólicas es causa de diversos trastornos a la salud y de resquebrajamiento del tejido social y familiar, en cambio, la educación es promotora de la formación personal y de cohesión de valores”, enfatizó, “es de justicia y lógica que la recaudación de derechos por la actividad alrededor de las bebidas alcohólicas sea considerada para promover la educación en nuestra niñez y juventud”.

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