CIUDAD DE MÉXICO.- Un grupo de 120 ejidatarios y sus familias originarios de Álamos, Sonora, se manifestaron ayer en las oficinas de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) en la Ciudad de México.
Los ejidatarios acusan a la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conap) de presionarlos para que no puedan realizar trabajos de exploración minera en la reserva Álamos-Río Cuchujaqui.
“Somos siete ejidos y más de 300 ejidatarios que estamos en la fase de exploración de materiales, pero ya no nos quieren dejar trabajar, nos amenazan con multas de la Profepa”, dijo Benjamín Lagarda Burgos, ejidatario de Álamos.
Los ejidatarios representan a unas mil personas que habitan los ejidos La Aduana, Tetajiosa, Agua Caliente, Choquincahui, Baboyahui, Guirocoba y Minas Nuevas.
DENUNCIA CORRUPCIÓN
Los manifestantes denuncian “diversos actos de corrupción” de funcionarios federales del Área Natural Protegida de la sierra de Álamos.
Las multas de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) han llegado hasta los 30 mil pesos por una carga de leña.
“El fin de semana almacenaron un cerro de material para decir que era material extraído por nosotros. Dicen que se mataron siete venados, lo cual no es cierto”, dijo Lagarda Burgos.
Los afectados solicitan una mesa de diálogo con las autoridades federales de Semarnat para que “pongan fin a la serie de atropellos y corruptelas que han sufrido desde hace años”.