A pesar de la eliminación del subsidio al programa de estancias infantiles, responsables de guarderías afirman que no cerrarán las puertas “a esos niños que lo necesitan” y seguirán operando.
Ángeles Santillán, representante de las estancias en la Ciudad de México, dijo, en entrevista con El Heraldo de México, que “lo que sí es garantía es que nosotros no vamos a cerrar”, pues eso sería un retroceso en la educación de los niños y en el desarrollo del país.
Hasta junio de 2018 la Sedesol tenía un padrón de alrededor de 300 mil menores que eran atendidos en las guarderías.
Las responsables estiman que las estancias, además, dan trabajo a 37 mil personas, las cuales, de cerrar, perderían su fuente de empleo.
Sofía Morales, representante de mil 200 estancias en el Estado de México, subrayó que en total, el cuidado de un niño cuesta por lo menos tres mil pesos mensuales.
“Desde el momento que nos dicen que el recurso ya no nos va a llegar y se dará a la mamá y al papá, ya no sabemos si lo destinarán para nosotros”, dijo.
Los recursos que las estancias reciben, detallaron las responsables, se destinan para las dos comidas y una colación que reciben los menores, además de otros gastos fijos, como sueldos, renta, internet y el programa interno de protección civil que deben actualizar año con año.
Guadalupe Roldán es responsable de una estancia en la alcaldía de Iztacalco, en la cual atiende a 29 niños, detalló que en los 12 años que lleva de pertenecer al programa les han realizado auditorías mensuales, visitas y supervisiones.
“No sé en qué rango de autoridad o qué instancias puede decirse que hay corrupción. Yo invito a las autoridades a que nos visiten, nos conozcan, que revisen las listas, que cuenten a los niños, no veo dónde puede haber un acto de corrupción”, expuso.
Ángeles Santillán consideró que el exhorto aprobado ayer en el Senado, para pedirle a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) la reasignación de recursos para el programa de estancias infantiles les da esperanza para continuar.
También espera que las reglas de operación del programa sean publicadas, como lo pidieron los senadores, para tener certeza de cómo se va a trabajar.
No obstante, no descartó que de no reasignarse los recursos pudieran acudir a la ONU o la Unicefpara solicitar su apoyo en pro de los derechos de los niños.
Ayer en el Senado se aprobó por unanimidad un exhorto a la SHCP luego de los reclamos generados por las prestadoras de servicio y padres de familia.
POR LIZETH GÓMEZ, RICARDO ORTIZ E IVÁN RAMÍREZ
jrr
