El Instituto Nacional Electoral (INE) retendrá el Impuesto Sobre la Renta (ISR) a sus más de 10 mil empleados, pero no lo enterará a la Secretaría de Hacienda, lo utilizará para participar en la organización de las elecciones de Baja California, Aguascalientes, Durango, Quintana Roo y Tamaulipas.
Esta acción –cuyo monto equivale a alrededor de 600 millones de pesos– es la repuesta del instituto para hacer frente al recorte de 950 millones de pesos aplicado por la Cámara de Diputados, en el Presupuesto para el 2019.
En contraste, los consejeros electorales solo recortaron 7.1 millones de pesos del gasto destinado a gasolina (cuyo monto global se desconoce) y 5.5 millones de pesos del rubro Congresos y Convenciones.
Los impuestos correspondientes al semestre julio-diciembre serán enterados a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), una vez que esa misma dependencia entregue al instituto la ampliación presupuestal por 619 millones de pesos prometida para hacer frente a los comicios locales.
“Por primera vez en su historia, el INE estará postergando el pago de obligaciones fiscales”, reconoció Bogart Montiel, director Ejecutivo de Administración del organismo electoral.
La decisión de no enterar a Hacienda el ISR de los trabajadores del INE fue aprobada por la Comisión de Presupuesto y será votada por el Consejo General, el próximo 23 de enero.
