Los convenios de adhesión al Sistema Nacional de Coordinación Fiscal permiten a la Federación recibir recursos de los estados por concepto de recaudación fiscal y de impuestos.
JALISCO.- Ante la disminución de las retribuciones federales para Jalisco, el gobernador Enrique Alfaro Ramírez anticipó la eventual separación de su administración de los actuales convenios de adhesión al Sistema Nacional de Coordinación Fiscal, que permiten a la Federación recibir recursos de los estados por concepto de recaudación fiscal y de impuestos.
La salida o permanencia se definirán mediante un estudio que evaluará la aportación de recursos económicos del estado al gobierno federal y el tamaño de la economía estatal respecto a los otros estados del país, para así evaluar si la repartición federal fue justa o no conforme a las aportaciones del estado a la economía nacional.
“No es un amago, es un justo reclamo a la Federación de decirle, tenemos que revisar esto; nos están dando un trato injusto”, dijo.
El mandatario fue enfático al señalar que la distribución de recursos que hizo el gobierno federal fue injusto y que tiene un sesgo político, y precisó que Jalisco este año recibe ocho mil 640 millones de pesos menos que en 2018.
“No creo que se necesite un análisis de gran profundidad para ver los rasgos básicos y evidentes de diseño presupuestal si veo cuando menos señales que me hacen pensar que hay otro tipo de propósitos”, sostuvo el mandatario.
Dijo también que buscará una reunión emergente con el presidente Andrés Manuel López Obrador en su visita a Jalisco durante la tercera semana de enero. “Espero antes o al menos en la gira tener espacio para platicar sobre el presupuesto y aspectos generales como línea 4 del tren eléctrico y desajustes para el cierre línea 3, El Purgatorio, saneamiento Río Santiago y un esquema distinto para resolver proyecto de libramiento sur de Puerto Vallarta, entre otras cosas”, dijo.
Por otra parte, dijo que emprenderá adecuaciones presupuestales para paliar la falta de dinero federal, “de maniobra que creemos, podemos tener, apretando algunas cosas, es de alrededor de dos mil 500 millones de pesos, que podremos replantear o más bien orientar a asuntos que hayan quedado desatendidos por las condiciones en las que nos dejaron en el presupuesto federal”.