La presidenta nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Claudia Ruiz Massieu, anunció que su partido, a partir de ahora, será “una resistencia política”, ante una administración que, sin duda fue electa por la vía democrática, pero que con sus acciones demostró ya su intención de gobernar por encima de las instituciones, de la ley y de los derechos”.
No debería sorprendernos, agregó, “las pulsiones autoritarias del nuevo gobierno ya las conocíamos, y lo señalamos con oportunidad, pero ahora la realidad es que esa nueva mayoría está en el poder y, ante ello, debemos pasar los priistas de las advertencias a la resistencia”.
En el discurso más severo que ha pronunciado desde el 1 de diciembre pasado, Ruiz Massieu dijo que, ahora, “ya no podemos solo indignarnos, tenemos que oponernos de forma firme, frontal y valiente. No es momento de hacer matices ni refugiarse en ambigüedades, sino de usar palabras claras y emitir juicios realistas”.
Advirtió, “con franqueza”, que “vienen tiempos muy difíciles para México y para el PRI. La nueva administración ganó a la buena, lo reconocemos, pero también quiere perpetuarse a la mala”, subrayó.
Al encabezar el evento “Responsabilidad y Firmeza. Actualización del Programa de Acción”, en la sede tricolor, la también senadora de la República dijo que “esta nueva administración se ha empeñado en demostrar —en tan sólo 15 días—, que necesita un contrapeso y el priismo debe estar preparado para ser ese contrapeso”.
Añadió que la administración del Presidente Andrés Manuel López Obrador “no quiere gobernar desde la pluralidad democrática; quiere dominar desde la intransigencia de su mayoría. El oficialismo no quiere que los opositores cooperemos, construyamos; pide que nos arrodillemos. No desea que opinemos, espera que acatemos”, subrayó.
Ruiz Massieu denunció que este gobierno confunde la crítica institucional con el agravio personal.
POR LUCIANO FRANCO